Mientras en El Trece festejaban sus 19 premios y los 25,8 puntos de rating, en América estallaba un conflicto entre Jorge Rial y las autoridades del canal
Hubo un tiempo en que lo que se veía en pantalla de la ceremonia de entrega de los premios Martín Fierro era tanto como lo que quedaba reservado para los privilegiados invitados a la fiesta. Las imágenes de la transmisión oficial mostraban los saludos cordiales, las sonrisas y los aplausos, pero no alcanzaban a enfocar esa apurada pero significativa charla entre Susana Giménez y Marcelo Tinelli, ni captaban el entusiasmo de la mesa de Adrián Suar por el rating minuto a minuto de la transmisión. Pero eso era antes y esto es ahora. Ahora, anteayer, no hubo centímetro del salón del hotel Hilton sin teléfonos con cámaras que, algunas aficionadas y otras profesionales, convirtieron en transparente lo que antes se ocultaba tras una glamorosa cortina de misterio. Quién ganó y quién perdió dejó de importar demasiado, para dejar lugar a los programas de chimentos hechos al paso. Todos prometiendo mostrar la fiesta desde adentro como si se tratara de un privilegio cuando ya no lo es. Y, llamativamente, uno de los ciclos más entusiastas en esta cruzada exhibicionista, Intrusos del espectáculo , ayer no salió al aire.
Mientras en El Trece festejaban sus 19 premios, los 25,8 puntos de rating y el desarrollo de una ceremonia que con sus altibajos (ver aparte) contó con una producción aceitada y eficiente, en América los Martín Fierro provocaron controversias que nada tuvieron que ver con los votos de los integrantes de Aptra. Que una vez más la asociación de periodistas de televisión y radio haya elegido a la mayoría de los ganadores entre los que trabajan en el canal que emitió la ceremonia fue una polémica que quedó vieja cuando Jorge Rial no salió al aire ante el aparente pedido de las autoridades de América de que no se hiciera mención de los Martín Fierro en su pantalla. Así, uno de los programas con mayor rendimiento de rating del año para Intrusos -en 2010 su mejor medición fue de 11,7 el día después de los premios- quedó en el limbo, ante el enojo de las autoridades del canal que solía transmitir los premios. Aparentemente el hecho de que sólo Mariana Fabbiani haya conseguido un galardón -a la mejor conducción femenina- molestó tanto a quienes durante años organizaron la fiesta para Aptra que unos diez minutos antes de la salida al aire Rial y sus muchachos recibieron la antitelevisiva orden. Así, mientras en Twitter se seguía discutiendo la tensa presencia de Mirtha Legrand en la fiesta, siempre dispuesta a retar a los noteros por lo mal que están tratando a su familia, el conductor de Intrusos salía de América acompañado por Luis Ventura y sus abogados. Y la pantalla se quedaba sin programa que emitir. En lugar del ciclo de chimentos que hace días promocionaba el propio Rial desde su perfil de Twitter con una cobertura de los Martín Fierro «como nadie te la puede dar. Con camaritas adentro», el canal decidió poner una emisión repetida de Ran 15 . No deja de ser irónico que la emisora que comenzó una cruzada contra el uso en su pantalla de material realizado por otros canales -primero ShowMatch , ahora los Martín Fierro-, ante la emergencia haya puesto en el aire un programa de archivo.
«Nadie renuncia a su casa. En todo caso le cambian la cerradura», escribió Rial en su perfil de Twitter apenas pasadas las 16.30, cuando las redes sociales ya especulaban con el desembarco del programa de chimentos en Telefé. Aunque algunos hablaban de la renuncia del conductor y hasta de un acuerdo previo con otra emisora, lo cierto es que su mensaje en la tarde de ayer daba a entender otra cosa. Sin explicaciones oficiales de ninguna de las partes, la programación vespertina de América continuó con el comienzo -con media hora de adelanto-, del talk show Los unos y los otros y la instrucción para el resto de los ciclos de no mencionar los Martín Fierro. Una tarea compleja para Infama y Un mundo perfecto , pero especialmente difícil para RSM , ya que su conductora fue la única en llevarse un premio del canal.
Aparentemente después de once años en la pantalla de América, Jorge Rial podría dejar su espacio vacante. Sin Mirtha Legrand en pantalla -ya comenzaron las especulaciones sobre su posible regreso al mediodía-, la emisora parece haber perdido su rumbo. Y todo por intentar tapar el sol -de El Trece- con un dedo. Aunque en América no lo muestren, el resto de los canales se dedicó a repetir cada uno de los momentos de la noche de la TV y la radio, una fiesta que, a pesar de intentarlo, no consigue escapar de los conflictos y las cámaras intrusas. Aunque después no salgan por ningún lado.
Fuente: La Nación