El delantero rompió su compromiso con la modelo a 40 días de la boda. Así desató una tormenta en el Río de la Plata, que sigue en las tribunas, donde alguien desplegó un cartel: «Diego, menos mal que no te casaste»
Sebastián Abreu, otro delantero uruguayo, prometió «carnear» [sic] a la estrella del seleccionado rival, Lionel Messi. Pero la pasión y la desmesura no serán sólo deportivas en estos días de Copa América en la Argentina.
En el partido entre Uruguay y México, el 12 de julio pasado, en la ciudad de La Plata, los hinchas uruguayos desplegaron una bandera que decía «Billetera mata Forlán», firmado por La Banda de Zaira, parafraseando así el dicho popular según el cual «billetera mata galán», es decir que el dinero es un poderoso instrumento de seducción, insinuando que el amor de la modelo y conductora argentina por su campeón no era del todo desinteresado.
En concreto, el culebrón protagonizado por Diego Forlán, ganador del Balón de Oro de la última Copa del Mundo en Sudáfrica, y la bella modelo argentina Zaira Nara tiene todavía algunos capítulos que entregar.
Para los fans uruguayos, ella es la mala de la película. Ya lo dicen los tangos: «las mujeres siempre son / las que matan la ilusión». Un hincha denunció indignado: «[Zaira] hizo un muñeco con su ex y le pinchó las piernas». Habrá que cerrar filas en torno al delantero y defenderlo de las malas artes de la despechada y del acoso de otras damas que ponen sus ojos en él -o en su cuenta bancaria.
El hecho de que Diego Forlán no haya hecho ningún gol desde que puso los pies en la Argentina alienta la teoría del maleficio que, aunque cueste creerlo, la propia víctima tuvo que desmentir en una entrevista televisiva: «No pasa nada. Hay situaciones en las que se da y otras que no. Está todo bien y no hay ningún muñeco».
Otra de las banderas exhibidas en la tribuna uruguaya era muy explícita: «Diego, menos mal que no te casaste». Esto era una alusión a un tweet -ponzoñoso, pero también enigmático- que envió la ex novia al estallar la noticia: «Menos mal que no me casé». Esta frasecita y otras generadas desde el entorno de la modelo, generaron, incluso, insinuaciones acerca de una presunta homosexualidad del astro del fútbol uruguayo: una ofensa nacional que no se perdona.
A la ruptura del compromiso, le siguió un verdadero «clásico» rioplatense destinado a establecer quién fue el o la que no se quiso casar, en el cual no sólo intervinieron los directamente interesados, sino, también, el padre de la chica, los periodistas del espectáculo, los columnistas de programas de chismes sobre la farándula y, finalmente, también la tribuna futbolera. Como es de suponer, del lado charrúa defienden al hombre. «El que no se quiso casar fue Forlán y, además, Zaira gastaba mucho», declaró un hincha charrúa, muy convencido.
La respuesta argentina no se hizo esperar. Fue en otra tribuna, durante el partido en el que la Argentina le ganó a Costa Rica, con un cartel que decía: «Forlán, Zaira es nuestraaa!!!».
En concreto, la separación dividió a los argentinos y uruguayos casi tanto como la polémica por la nacionalidad de Carlos Gardel. Y es natural que las pasiones sigan encendidas, puesto que la ruptura tuvo lugar el pasado 12 de junio, hace apenas un mes.
El romance, además, fue muy mediático, por tratarse de dos figuras conocidas. Y hasta adquirió carácter de tema de interés binacional, al punto que el presidente del Uruguay, José Mujica, llegó a describir a Zaira Nara como «un camión» (una mujer muy atractiva). Claro que eso fue antes del «menos mal que no me casé».
Si uruguayos y argentinos ya aprovecharon enfrentamientos con seleccionados de otros países para reflotar la polémica, ¿qué se puede esperar del duelo que los pondrá cara a cara el sábado 16? Como mínimo, una guerra de carteles en las tribunas, en paralelo con la contienda deportiva en el campo de juego.
Considerando el ingenio que suelen desplegar las hinchadas sudamericanas para burlarse de los rivales, la diversión estará asegurada.
Fuente: Infobae
