En otra medida para restringir las importaciones, desde hace varios meses que las computadoras portátiles de esa marca dejaron de ingresar al país. Pero además trabaron sus componentes, con lo cual los servicios técnicos deben restringir las reparaciones. Las señales contradictorias de Cristina para el sector.
«Era una cabeza importante, uno d elos hombres que más ha investigado, me hubiera gustado conocerlo», recordó Cristina con admiración al fundador de Apple, Steve Jobs, al otro día de conocerse su fallecimiento, que conmocionó al mundo, durante la inauguración del Polo Científico Tecnológico en las ex bodegas Giol de Palermo.
Sin embargo, esa admiración no parece haber penetrado en la dura piel de los funcionarios de la Secretaría de Comercio Interior que lidera Guillermo Moreno, que incluyó a las Macbook -las preciosas notebook creadas por Steve Jobs-, en la lista de productos que ya no pueden encontrarse en el país.
Según constató LPO la situación para los importadores exclusivos de la marca de la manzanita comenzó a complicarse hace seis meses y desde hace dos que se cerró definitivamente la frontera para las portátiles de Apple.
Lo extraño es que s etrata de un producto de elite que representa un ínfimo procentaje del mercado de computadoras portátiles. Históricamente Moreno se centró en defender los rpecios y la producción de los bienes de consumo popular y liberó los denominados bienes suntuarios que consumen los sectores de mayor poder adquisitivo.
Pero al parecer las medidas del gobierno por intentar equilibrar la balanza comercial ya no reconocen límites. Como anticipó LPO, estas restriccione stambién afectaron a la importación de bienes de lujo d ela denominada línea «blanca» como las cocinas Smeg, los aires acondicionados LG Art Cool o los lavarropas de la firma italiana Ariston.
En el local Maxim, dedicado a comercializar productos Apple, señalaron que esperan que en diciembre pueda ser destrabada una serie de netbooks, “luego de arduas negociaciones” con el gobierno. Pero reconocieron que más allá de esa tenue esperanza, hace varios meses que las portátiles «no están entrando al mercado».
De hecho en los locales de esa firma se exhiben los distintos modelos de las Macbook, pero cuando se intenta consultar por alguna de ellas, prolijamente exhibidas, los vendedores responden con un decepcionante: «Sólo nos quedan las Mac de escritorio, no hay Macbook en venta».
De hecho, en Maxim reconocen que la partida que aspiran a destrabar -en el mejor de los casos- no será demasiado numerosa, por lo que recomiendan a sus potenciales compradores dejar una seña del 50 por ciento para reservar su computadora.
En tanto que desde Mac Station -la otra gran firma comercializadora de Apple- explicaron a LPO que desde hace cinco meses “hay mayores trabas” para importar, lo cual volvió al proceso “menos dinámico”. Reconocieron que las ventas se han visto perjudicadas, pero agradecen que “la gente es comprensiva y se adapta a estos tiempos más lentos”.
Sin repuestos
Pero el problema no es sólo que ya no hay oferta de estas Mac portátiles, sino que las restricciones además incluyeron los componentes de las mismas, con lo cual la falta de repuestos ha obligado a los servicios técnicos a racionalizar las reparaciones para sus clientes.
Los locales en los que consultó LPO para reparar las Mac “portátiles”, no aceptaban realizar el servicio técnico a menos que el cliente hubiera comprado el producto ahí mismo; de lo contrario se lo rechazaba. Y es que ante la falta de repuestos, las empresas distribuidoras de esta marca eligen priorizar la atención de sus clientes y adoptan una posición muy conservadora a la hora de administrar sus stocks de repuestos.
Por otro lado, la política hacia la línea de Ipods, Iphones y Ipads -tan en boga entre los funcionarios kirchneristas y los jóvene sde La Cámpora- es confusa. En Maxim la venta se desarrolla con total regularidad, mientras que en Mac Station reconocen que están viviendo de vender lo que aún queda en depósito. En particular mencionaron las dificultades para conseguir el modelo “Nano” del Ipod.
De cualquier manera, un denominador común en todos los distribuidores oficiales de Appel es la cautela a la hora de hablar sobre las restricciones que están sufriendo, acaso temiendo molestas a los funcionarios y que vuelva a cerrarles todo acceso a la mercadería.
Una historia de desencuentros
Lo cierto es que la firma del genio de Silicon Valley nunca logró alcanzar una buena reación con el gobierno de Cristina. Cuando el kirchnerismo iniciño su política de «equilibrio» de la balanza comercial obligando a los importadores a exportar -cualquier cosa, vino, arroz, lo que sea- para compensar lo que ingresaban o en su defecto montar una fábrica de ensamblado en Tierra del Fuego, la firma de Steve Jobs decidió discontinuar sus Iphone en el mercado argentino.
De hecho, la principal competidora de Apple en el rubro de los Smartphone, la canadiense RIM que fabrica los Blackberry, si aceptó montar una línea de ensamblado en la provincia más austral.
Sin embargo, hoy CRistina pareció matizar esta política. Al inaugurar la nueva planta de Newsan en Tierra del Fuego, advirtió que “el proteccionismo no será eterno”.
“Las excesivas medidas de protección tornan no competitivas a las empresas» agregó y enumeró los casos de países del sudeste asiático y China, en los que se aplicaron medidas proteccionistas para la industria que con el correr de los años fueron levantadas, una vez que los desarrollos locales maduraron lo suficiente como para poder exportar y competir en el mundo. Una tarea en la que sin embargo, hasta ahora nadie logró alcanzar el liderazgo del extinto Jobs.
La Política Online
