Berlusconi ofreció negociar una nueva agenda que permita al gobierno sobrevivir hasta que se celebren nuevas elecciones parlamentarias en 2013.
Roma.- El primer ministro Silvio Berlusconi pidió el lunes a los legisladores que le den un voto de confianza a su gobierno durante una inminente moción de censura, alegando que acabar con su gobierno sería una «locura» en momentos en que es esencial la estabilidad frente a la crisis económica.
Luchando por su supervivencia política, el mandatario italiano habló con un grupo de legisladores rebeldes que han prometido intentar expulsarle durante las votaciones del martes, informó AP.
Berlusconi ofreció negociar una nueva agenda que permita al gobierno sobrevivir hasta que se celebren nuevas elecciones parlamentarias en 2013, al igual que una reorganización del gabinete que ofrecería puestos en el gobierno a quienes le apoyan en la crucial prueba parlamentaria.
«Lo último que Italia necesita es una crisis política», dijo Berlusconi durante un discurso de media hora ante el Senado.
Berlusconi enfrenta el martes votaciones de censura en ambas cámaras del Parlamento, tras romper filas con quien fuera su aliado más cercano, Gianfranco Fini, cofundador de su partido.
Berlusconi, de 74 años, llegó a ser muy popular, pero eso ha cambiado. Su capital político se ha diluido tras escándalos en su vida privada relacionados con fiestas escandalosas y supuestos encuentros con prostitutas.
Berlusconi basó su discurso en los riesgos que enfrenta Italia si se acaba con su gobierno.
«Si su preocupación sobre la difícil situación que vive Italia es honesta y real, entonces la única forma de avanzar es renovar la confianza en mi gobierno», dijo Berlusconi. La votación del martes, dijo, «será la prueba del realismo y la sabiduría política».
Italia registra un alto nivel de deuda pública y recientemente se habló de que podría verse sumergida en la crisis de deuda que sufren otras naciones de la eurozona, pero aún se considera que el país es de bajo riesgo debido al bajo nivel de deuda privada, un sistema bancario relativamente sano y su experiencia a la hora de lidiar con altos niveles de deuda pública.
Fuente: EL UNIVERSAL