Se trata de Jorge Di Lello, quien extendió la acción judicial a Alejandro Vandenbroele, José María Núñez Carmona y Agustina Kampfer, novia del vicepresidente de la Nación. La causa está en manos del juez Ariel Lijo.
El fiscal federal Jorge Di Lello imputó por “enriquecimiento ilícito” al vicepresidente Amado Boudou, a José María Núñez Carmona, Alejandro Vandenbroele, a Agustina Kämpfer y a diez sociedades anónimas, entre ellas The Old Fund, la compañía que está al frene de la exCiccone.
La denuncia, que recayó en el juzgado federal de Ariel Lijo, fue radicada por el periodista Cristian Sanz, junto al abogado Alejandro Sánchez Kalbermatten, quienes solicitaron que se investigue la configuración de los delitos de encubrimiento y lavado de activos de origen delictivo (Art. 277 del Código Penal) y enriquecimiento ilícito.
Según la denuncia, el titular del Senado “no sólo sería partícipe de sospechosas operaciones incompatibles con su función de servidor del pueblo, que lo incriminarían en un surtido de delitos que están siendo investigados por la justicia federal, sino también, que llevarían a suponer el enriquecimiento ilícito del aludido, en tanto los bienes que se estiman de su titularidad, testaferros mediante, de corroborarse -merced a esta encuesta que se propugna-, configuraría el delito previsto y reprimido por el Art. 268 del Código Penal de la Nación”.