Legislatura Hoy

Leyes y políticas

Cajas sí, cajas no: Arden las redes sociales por un Plan B del Gobierno

El fracaso del blanqueo parece un hecho antes del blanqueo mismo (siempre hablando en términos de los fines no ilícitos). Ocurrió en 2009, cuando el propio Ricardo Echegaray, titular de la AFIP, debió admitir que los resultados no fueron satisfactorios. Lo único que se blanqueó con el anuncio es la necesidad excesiva de dólares, lo que se presta a pensar fácil en el Plan B: si en las cajas de seguridad hay tantos dólares como las reservas del Central, todo indica que allí está el botín… Y es en este punto, donde urge mayor precisión del Gobierno.

Jorge Zaín Asís ‏@CayetanoAsis
Consultor: «Si se cargan la Justicia, y en dos semanas aprueban este blanqueo improvisado, aconsejo que no quede un dólar en cajas».

iProfesional ‏@iProfesional
Las cajas de seguridad guardan tantos dólares como las reservas del Banco Central

Facundo Landívar ‏@flandivar
Van por las cajas, te apuesto. «Te dí la posibilidad de blanquear y no lo hiciste, jodete».

Diego Cúneo ‏@dscuneo
@flandivar Coincido. Por eso dije q el q tenga un mango en el banco, lo saque MAÑANA

El debate está abierto:

Agustín Monteverde ‏@Ag_Monteverde
2 razones 1) necesitan U$, 2) blanquear lo q se generó desde 2009
¿Será prefacio a un embate sobre cajas de segurid?

Exactamente el número de reservas que tiene, hoy, el Banco Central (BCRA), replica, en cantidad, al número total de dólares que contendrían, según estimaciones, las más de 700.000 cajas de seguridad que hay en los bancos en la Argentina.

Son aproximadamente unos US$40.000 millones que están depositados, –mucho de eso sin registro alguno por parte del Fisco– como consecuencia de la histórica desconfianza de los argentinos por su moneda, las distintas crisis económicas que afectaron el poder adquisitivo del dinero y que hicieron que esos recursos se encuentren fuera del sistema financiero (pero dentro de los bancos), consigna ‘El Cronista’ este miércoles.

Claro que, siempre que se hable de dinero ‘improductivo’ o no declarado, a esa cifra habrá que sumarle unos US$160.000 millones que los argentinos tendrían además depositados en paraísos bancarios de Suiza, Luxemburgo, entre otras plazas del exterior que prometen guardar secreto sobre los titulares de las cuentas.

Es que según números del INDEC de fines de 2012, los argentinos acumularon ahorros en divisas por US$170.000 millones fuera del sistema financiero, casi el 50% del PBI.

Apuntado como uno de los sectores que será seguido de cerca por parte de la AFIP y que será “tentado” por la política de blanqueo que puso en marcha el Gobierno, los tenedores de ahorros no declarados – puntualmente los tenedores de divisas– son legión en la Argentina y tienen ahora una aparente y nada inocente disyuntiva.

“El Gobierno entiende que aquél que tiene dólares ahora puede, en lugar de nutrir el mercado paralelo y vender esos dólares, llevarlo al Banco Central y depositarlo para obtener una renta atractiva pero el problema es la credibilidad, es siempre el mismo problema”, señala un banquero que pidió mantener el anonimato.

Una estimación de la consultora ‘Bconomics’ que conduce el economista Fernando Baer señala que “en términos de dólares unos US$63.000 millones de los argentinos serían tenencias en dólares billete”. En este sentido sostiene que, “una forma de aproximarse a la cantidad de dólares que hoy están en las cajas de seguridad es considerar que dado que el 40% de la economía es informal, la tenencia de dólares sería de US$40.000 millones”.

A pesar de la relevancia que ha tenido históricamente la posibilidad de guardar dinero físico bajo llave, el funcionamiento de estas cajas ni siquiera se encuentra regulado por el Central. “La caja de seguridad es un servicio de los bancos pero no forma parte del sistema financiero, por ende no puede ser regulado por el BCRA”, sostienen en la entidad que conduce Marco del Pont.

La lectura que hacen quienes monitorean su funcionamiento desde los resortes del poder es que el dinero que en ellas se guarda no forma parte del sistema financiero y de alguna forma “conspira” contra el fortalecimiento del tejido crediticio y, por ende, de la economía en su conjunto, según relata ‘El Cronista’.

Desde la visión de los especialistas en el tema, en la actualidad no existe normativa alguna en la que puedan apoyarse los contratos que efectivamente se firman entre las entidades y sus clientes.

A pesar de que en muchos casos la ‘letra chica’ de los contratos establece un límite al valor de los contenidos de las cajas de seguridad (que en muchos casos es de US$50.000) por el cual el banco responde, los especialistas sostienen que la experiencia en nuestro país respecto de robos de cajas de seguridad indica que las entidades financieras generalmente terminan entregando montos mayores, a los efectos de disminuir el mayor riesgo reputacional que dispararía la disconformidad de los clientes afectados, concluye el matutino.

El nuevo proyecto de ley que el Gobierno envió anoche al Congreso para que sea aprobado a la brevedad, apunta también a estas cajas. El dinero deberá depositarse en un banco local. Para ello, a partir de la sanción y promulgación de la norma, los interesados tendrán hasta tres meses para blanquear los dólares.

Pero, ¿quién querrá los poco tentadores bonos que ofrece el Gobierno? Y una pregunta más básica: ¿quién confía en el Gobierno? Ciertamente, quienes guardan celosamente sus dólares, no.

El resultado, tal como la experiencia lo confirma, ya se anticipa «poco satisfactorio». Y en las redes ya esperan un envión cumpulsivo hacia las cajas.

En teoría, por las cajas de seguridad no pueden ir porque ya consultaron a la Corte, en forma confidencial, y las respuestas fueron todas negativas.

Las estrategias para desalentar su uso mediante medidas impuestas por el Gobierno a los bancos que hagan casi imposible poder ofrecer este servicio, también tienen un límite.

El mismo que la imaginación K…

Por eso, en las redes casi cae de maduro que vuelvan sobre lo ya anunciado, ante la falta de ideas para solucionar los problemas de fondo.

Ya en 2011, el titular de la AFIP, Ricardo Echegaray, anunció que aumentarían los controles sobre los propietarios de cajas de seguridad. Ocurrió entonces frente a las declaraciones que realizaron algunos de los damnificados por el robo a las cajas de seguridad en el Banco Provincia de la sede de Belgrano.

«Las personas que tienen bienes en las cajas de seguridad los deben declarar fiscalmente, ya que estamos trabajando sobre la noticia que nos dan los propios damnificados», aclaró Echegaray.

El funcionario añadió que le pedirá «información al banco para chequear si lo que denuncian como tenencia en las cajas de seguridad se encuentra declarado a través de Bienes Personales».

Inmediamente, le llegó la respuesta del entonces presidente del Bapro, Guillermo Francos, quien le recordó que «la caja de seguridad es secreta y reservada».

Francos salía así al cruce del anuncio de Echegaray en la radio ‘La Red’: “la relación del cliente con la caja de seguridad es propia, secreta y reservada por lo cual haremos lo que legalmente nos digan nuestros asesores, y si hay algún reclamo de parte de la AFIP, haremos legalmente lo que corresponda».

Pero el avance del oficialismo sobre la Justicia es la gota que hoy completa el vaso…

Fuente: Urgente24

Debes estar conectado para publicar un comentario.