Por pedido de la actriz, la médica explicó cómo fueron las etapas en el procedimiento al que se sometió para prevenir el cáncer de mamas.
Angelina Jolie demostró que, antes que ser una femme fatale de Hollywood, es una mujer valiente y «heroica», como la describió su pareja, Brad Pitt, después de que la intérprete revelara públicamente que se sometió a una mastectomía doble para combatir sus probabilidades de padecer cáncer de mama.
«Es importante enfatizar que el caso de cada mujer es diferente. La cirugía no necesariamente puede ser la opción correcta para todas, y hay alternativas disponibles. Como dice Angelina en su artículo, lo importante es conocer esas opciones», reveló la doctora Kristi Funk en un Blog del Centro de Mamas Pink Lotus, donde la actriz decidió someterse al arduo procedimiento.
La médica explicó que Jolie, de 37 años, le pidió que enunciara las cinco fases de su tratamiento, que se extendió por casi un año si se tiene en cuenta el tiempo de preparación y los estudios realizados antes de la primera operación a la que se sometió tras enterarse de que posee el gen BRCA1.
«Las mujeres que tienen el gen BRCA1 o BRCA2 tienen hasta 87 por ciento de probabilidades de padecer cáncer de mama y 54 por ciento de cáncer de ovario, contra un 12 por ciento que tiene la población general, y menos del 1 por ciento en el caso del cáncer de ovarios», ratificó Funk. Días atrás, Jolie dio las mismas cifras a la hora de explicar el por qué de su decisión.
«La madre de Angelina tuvo cáncer de mama y desgraciadamente falleció por un cáncer de ovario. Su abuela materna también fue diagnosticada con cáncer de ovario. Esa historia familiar sin dudas sigue el criterio de la compañía de seguro médico (de la actriz), que cubrió el estudio genético», explicó la especialista, mientras que Jolie confirmó que el examen en cuestión cuesta unos 3 mil dólares en los Estados Unidos.
El tratamiento de Jolie incluyó una serie de mamografías, exámenes y análisis de sangre que se extendieron durante 10 meses, hasta que finalmente llegó a la tercera etapa, en la que la paciente debe elegir si se someterá a una mastectomía doble.
En el caso de Jolie, la doctora Funk le practicó el 2 de febrero pasado un procedimiento llamado «nipple delay» en el que le levantó la piel de los pezones y le extrajo un disco de tejido para analizarlo y comprobar que no presente células malignas. «Su compañero tomó su mano para saludarla apenas se despertó de la anestesia en cada una de las operaciones», agregó la médica en referencia a Brad Pitt.
«Después de la operación, su piel tenía algunos moretones pero volvió a la normalidad en seguida. Dos días después del procedimiento llegaron buenas noticias: el tejido extraído de atrás de ambos pezones estaba completamente normal», agregó Funk.
La doctora desarrolló una técnica para la biopsia de Jolie en la que se le inyectó un líquido azul para que contrastara en los vasos de sus mamas y le diera la oportunidad a los especialistas de analizar si los nódulos linfáticos estaban sanos o no, sin la necesidad de extraerlos.
Después de las mastectomías, la actriz se sometió a un procedimiento para expandir el tejido de sus mamas de manera progresiva con el objetivo de maximizar el flujo sanguíneo en la zona en vez de comprimir los vasos con un implante.
«El 16 de febrero, Jolie tuvo la operación principal, que puede durar hasta ocho horas. Las mastectomías salieron bien, y los nódulos centinela fueron identificados, pero no extraídos», convino la médica.
«Después de las mastectomías asistí al cirujano plástico Jay Orringer, quien realizó el primer paso en la reconstrucción con la aplicación de los expansores de tejido», aclaró Funk, quien explicó que se trata de dos implantes mamarios vacíos que se llenan con solución salina por etapas, hasta llegar al tamaño deseado.
«Yo creo que la recuperación refleja las expectativas (del paciente). Angelina esperaba sentirse bien, estar activa», describió la médica. «El lunes (después de la cirugía), llamé a Angelina para decirle que habían llegado los resultados de Patología y se confirmaban nuestras esperanzas: todo el tejido mamario era benigno», reveló.
«El cuarto día después de las mastectomías, yo estaba contenta de encontrarla no sólo con buen ánimo y mucha energía, sino también con dos paredes de su casa cubiertas con el nuevo storyboard del próximo proyecto que dirigirá», anticipó Funk. «Mientras hablábamos, ella tenía seis drenajes colgando del pecho, tres de cada lado, ajustados a un cinturón elástico», describió.
«Al día siguiente recibió la su primera inyección de solución salina en los implantes expansores, con lo que comenzó el proceso gradual de preparación del tejido para la etapa final de las operaciones: la reconstrucción. Se le retiraron cuatro de los seis drenajes», enumeró la médica.
«Cuatro días más tarde, en el noveno día de pos operatorio, se le retiraron los dos drenajes restantes. La segunda inyección de solución salina fue el 4 de marzo pasado, y las cuatro semanas siguientes ella trabajó muy duro», aseguró Funk.
La médica cantó las loas a la valentía y el coraje de Jolie, quien puso el bienestar de sus hijos por sobre sus propios miedos y se sometió a una operación para bajar sus probabilidades de padecer cáncer de mamas a un 5 por ciento.
«La última operación ocurrió el 27 de abril de 2013, diez semanas después de las mastectomías. Fue la reconstrucción de las mamas con implantes definitivos, que salió muy bien y la llevó al final de su periplo quirúrgico», resumió Funk.
Fuente: Minuto Uno