Es un abogado bisexual en la tele y un escritor crítico en el teatro. La nostalgia del pasado y sus inicios. Su apoyo a Michelle Bachelet.
El hombre transita las tablas en una amenaza de erupción permanente. Grita, se mueve, hasta que explota sin más rodeos. Recrimina a sus pares, escritores en la ficción, por no terminar de jugarse todo, y luego se repliega hasta nuevo aviso. En Los elegidos, durante casi dos horas, Benjamín Vicuña se da el lujo de realizar una crítica descarnada, prolija y concluyente sobre el mundo literario. “No sé si tengo mucho tiempo para pensar, la verdad es que estoy muy cansado. Pero la obra de teatro llegó en un momento muy especial para mí. Mi alma necesitaba estar aquí”, dice.
Llegó a la Argentina hace algo más de ocho años, para convertirse en el marido de la modelo Carolina Ardohain y padre de sus tres hijos. “Nunca pensé que mi vida cambiaría tanto. Cuando uno es joven no hace planes, hoy me veo y me sorprende”, responde en un ejercicio introspectivo Vicuña, que el año pasado debió lidiar con el máximo dolor tras el fallecimiento de Blanca, su hija de seis años.
Casi como una estrategia de supervivencia, hoy sus días se reparten entre su familia y el trabajo en teatro y las grabaciones de Farsantes, la tira de Canal 13 donde interpreta a un abogado que a punto de casarse con su novia, se enamora de su nuevo jefe. “Presentar un conflicto bisexual es de vanguardia, aunque en este país se avanzó mucho gracias a la Ley de Matrimonio Igualitario. Todavía hay mucho camino por recorrer”.
Por: INFOnews
Fuente: TODO SHOW
