El conductor habló en Dadyman sobre su fuerte cruce con la diputada en la mesa de Mirtha Legrand.
El conductor Julian Weich habló sobre su regreso a la televisión de la mano de «Mi mamá cocina mejor que la tuya» y aseguró que la televisión “cambió mucho, pero yo no voy a dejar de conducir por eso, hay presión en el afuera y responsabilidad en uno mismo”.
En un imperdible mano a mano con Dadyman, el conductor manifestó que hoy es necesario hacer un programa que goce de buen rating, «si no, no sirve», al tiempo que destacó: “Siento que sé mucho de televisión pero que no sé lo que quiere el público, no sé nada del público, nunca voy a saber qué quiere ver la gente”.
Pero, como todos esperaban, Julián se refirió a su cruce con Elisa Carrió en la mesa de Mirtha Legrand. Encendida como siempre, la diputada lo acusó de burlarse de ella, a lo que Julián retrucó: «Yo no tengo bandera política, no me interesa lo partidario. Yo estuve charlando con Lilita antes y cuando llegamos a la mesa yo hacía algunos chistes porque soy así, no lo hacía con tono político, con doble intención”.
“Tuve muchísimas agresiones, tuve que pedir perdón porque no quise lastimar a nadie. Algunos me felicitan porque se supone que la bardeé y otros me putean porque dicen que le falté el respeto y no fue ni una cosa ni la otra”, se descargó el ex Sorpresa y media.
“En un momento le dije a Lilita que se iba a quedar sola, pero a nivel personal, desde lo humano, no desde lo político. Todo el mundo está tan sensible que con de qué lado estás. Todo lo que ven los demás, en la mesa no pasó”, intentó bajar el tenor el conductor, pero de todos modos apuntó contra la diputada: “Lo que pasó fue que Lilita agarró la batuta y habló y habló y yo metí cuatro chistes pavos y se armó algo que no pasó”.
En el cierre, Weich concluyó con un pedido para bajar los niveles de agresividad en las redes sociales: «Le pido a la gente que tuitea que no sea agresiva porque no sirve para nada. La gente tiene que pensar en positivo y hacer cosas buenas”.
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