El presunto agente pro iraní Alejandro «Yussuf» Khalil, uno de los protagonistas de las escuchas de la denuncia de Alberto Nisman contra la Presidenta, reconoció anoche que el clérigo Mohsen Rabbani, acusado de ser uno de los autores intelectuales del atentado a la AMIA , gestionó el envío de dinero al país a través de universidades de Teherán.
En una entrevista con el programa La Cornisa, que se emite por América TV, Khalil se refirió a una de las grabaciones del fallecido fiscal en la que habla sobre «la cotización» de la moneda con el ex agregado cultural de la embajada de Irán en Buenos Aires.
«Con Rabbani no tenemos ningún intercambio de dinero. Si podemos discutir el tema de los precios o de una cotización porque teníamos trabajos culturales. Las mezquitas se soportan con un diezmo, un quinto, que es un aporte islámico. Muchas veces las universidades de Teherán contribuían con nosotros y le decíamos «necesitamos tanto para hacer el trabajo religioso»», apuntó el secretario general de la mezquita At-Tauhid, uno de los acusados por Nisman de llevar adelante un «plan criminal» para exculpar a los iraníes por el atentado a la AMIA.
Khalil insistió en que Rabbani es su «referente religioso» y remarcó que los acusados por el ataque a la mutual judía se niegan a viajar a la Argentina para declarar porque «evidentemente no confían en la Justicia argentina». «No estoy diciendo que son inocentes. Yo estoy convencido de que la República de Irán no hace esas cosas. Si son culpables, que la paguen como la tienen que pagar», señaló.
Durante el reportaje, el supuesto agente pro iraní dijo que «no operó» para que el Gobierno firmara el memorándum de entendimiento con Irán, aunque reconoció que como «dirigente islámico» tenía «un interés mayúsculo» en el pacto con Teherán.
«Como dirigente islámico teníamos un interés mayúsculo en que se resuelva esto y todo lo que era entorno al memorándum para nosotros era de vital importancia», insistió.
Según planteó Nisman, el Gobierno buscó a través del memorándum con Irán exculpar a los acusados iraníes y acceder al petróleo de Teherán a cambio de granos y carne. En una de las grabaciones, el secretario general de la mezquita At-Tauhid hablaba sobre un intercambio comercial de granos.
«Como Irán compraba granos a las multinacionales de la Argentina a través de la bolsa de Nueva York, queríamos que las empresas medianas empiecen a tener un negocio directo con empresarios de Irán con los empresarios de acá. Se lo denomina la diplomacia de los pueblos. No diplomacia paralela [lo que describió Nisman]», indicó en La Cornisa. Y añadió: «Yo no puedo hablar en nombre de Irán, si puedo tener empresarios iraníes amigos y traerlos a trabajar con empresarios argentinos amigos».
Fuente: www.diariohoy.net
