A casi un mes de los atentados del 13 de noviembre en París, la policía francesa identificó al tercer terrorista suicida que atacó la sala de conciertos Bataclan, en la que perecieron 90 personas.
En Alemania, en tanto, fueron arrestados tres presuntos fundamentalistas islámicos que planeaban atacar Berlín.
Tras dos semanas de intensas investigaciones, el hombre que junto a Samy Amimour, de 28 años, y Ismail Omar Mostefai, de 29, irrumpió armado de kalashnikov en el Bataclan ya tiene un nombre y un rostro: el de Foued Mohamed Aggad, de 23 años, residente en Estrasburgo, Francia.
«Si lo hubiese sabido, le habría matado yo antes», dijo desesperado su padre en una entrevista a Le Parisien. Según la abogado de familia, fue un mensaje SMS enviado a su madre desde Siria lo que consintió llegar hasta su identidad.
«Tu hijo murió como un mártir con los otros hermanos el 13 de noviembre», estaba escrito en el macabro mensaje enviado desde el bastión del Estado Islámico.
La madre lo recibió a finales de noviembre, explicó la abogado, Francoise Cotta. «Me avisó inmediatamente y nos pusimos en contacto con la justicia», precisó.
Sucesivos exámenes del ADN permitieron confirmar la identificación del tercer terrorista kamikaze del Bataclan. En diciembre de 2013, Foued Mohamed Aggad había viajado a Siria con su hermano Karim y un grupo de ocho amigos residentes como él en Meinau, un barrio difícil de Estrasburgo.
Todos tomaron un vuelo de la Turkish Airlines de Frankfurt a Antalya, y después pasaron por la frontera turco-siria con los «passeurs» (pases) del Estado Islámico.
Dos de ellos murieron casi inmediatamente, al día siguiente de llegar, en choques internos entre yihadistas. Muy pronto el hermano de Foued no aguantó más y decidió, con otros compañeros, regresar a casa. Era la primavera (boreal) de 2014.
A su llegada a Francia fueron detenidos. Karim, de 25 años, está actualmente encarcelado. Solo Foued se quedó en Siria, en los campos de adiestramiento del Estado Islámico.
A su madre le contó por teléfono que estaba contento, que se había casado y que tenía un bebé. Excluía regresar a Francia, quería morir como un kamikaze en Irak.
Desde agosto, sin embargo, no llegaron más noticias. Hasta el escalofriante mensaje que lo identificaba como uno de los verdugos del Bataclan, el más joven.
Fuentes judiciales indicaron que el yihadista -nacido en Wissembourg, Alsacia- era conocido por los servicios secretos, estaba fichado en Francia por radicalización y era objeto de un aviso de la Interpol.
Es probable, por tanto, que hubiese regresado a Europa como clandestino, probablemente con documentos falsos como algunos de los otros autores de los atentados de París, ya que en caso contrario las computadoras de los servicios de inteligencia habrían lanzado automáticamente la alerta.
En tanto, tres islamistas fueron arrestados ayer bajo la acusación de estar planificando atentados en Alemania, el primero de los cuales en Berlín, reportó el diario Bild, según el cual uno de los tres habría llevado a cabo actividades de reclutamiento de yihadistas para el Estado Islámico.
Fuerzas especiales de la policía federal Bundeskriminalamt efectuaron allanamientos en varios apartamentos de la capital y en el barrio de Neukoelln en particular. Los tres detenidos son sospechados de haber creado una asociación terrorista y de estar preparando «acciones violentas contra el Estado».
La fiscalía general investiga, por otro lado, a otros tres jóvenes, de 17, 25 y 35 años, bajo la sospecha también de preparar atentados terroristas. Los más mayores habrían ayudado además al menor, que hoy se cree que está en Turquía, a viajar a Siria para unirse a las filas del Estado Islámico.
Agentes de la policía efectuaron también registros en relación a este otro caso, pero no fueron practicadas detenciones.
Fuente: Ambito
