
El cuerpo técnico y el plantel estuvieron atentos al sorteo y las miradas coinciden en que el grupo no es fácil: preocupan las distancias, la altura y el posible cruce con un equipo argentino (y encima, clásico). Ya se juega.Sin hacer un análisis profundo, la primera conclusión es que es un grupo ‘no fácil’, con mucho viaje. La dificultad la puede agregar el tercer rival, si toca Puebla o Racing”.
Los bolilleros -con selección previa- de la Conmebol dieron su veredicto. El grupo 3 es, para los ojos de América, el grupo de Boca. Y no sólo los hinchas pararon los preparativos de fiestas y vacaciones para seguir el sorteo -incluso, no fueron pocos los que separaron el aguinaldo pensando en algún destino poco convencional. Desde las distintas partes del mundo en las que jugadores, cuerpo técnico y dirigentes están distribuidos siguieron el minuto a minuto del show transmitido por Fox Sports, desde la sede de Luque. Y todos sacaron sus conclusiones.
Desde el cerebro del cuerpo técnico surgió la frase que encabeza el texto. Y no es un dato más la “preocupación” por los viajes y la distancia a recorrer. Arruabarrena lo reconoció en su última nota con Olé , todos sus colaboradores sostienen la idea. La rotación, que terminó con cierta mala reputación tras la eliminación con River en la última Libertadores, podría volver a ser utilizada. ¿La diferencia? La idea no es rotar partido a partido según marca el calendario, sino dependiendo de la competencia. Así, habría una base para el campeonato y otra para la Copa. Y los valores individuales clave podrán participar en las dos dependiendo de la importancia del compromiso y la distancia entre los juegos. De Bolívar, principalmente, preocupa la altura. Deportivo Cali es, a priori, bastante menos que un rival accesible. Y el cruce de primera fase que dará el cuarto integrante del grupo no tiene un preferido obvio. “No lo tengo tan claro. A mí jugar con los argentinos no me gusta, pero ahorraríamos viaje”, agrega otra voz autorizada dentro del vestuario principal de Casa Amarilla. La distancia y el desgaste, otra vez como factor clave. Saben, en todo caso, que en los detalles está la cuestión. Y en un año en el que Boca llega obligado a ser poco más que gran candidato no está para regalar ni una milla. Aunque Racing es una pesadilla de este ciclo… “Revancha no va a ser. Pero después de lo que pasó en la última Copa, que quedamos afuera por una cuestión extrafutbolística, la queremos más que nunca”, le sintetizó a Olé uno de los referentes del plantel. “¿Si preferimos tener a Racing o Puebla? Que sea el que tenga que ser. Hay que ganar y punto”. Esa es la cuestión.
Fuente: Olé