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Leyes y políticas

Monzó: “No va a ser un año fácil el 2017 desde el punto de vista parlamentario”

Lo reconoció el presidente de la Cámara de Diputados, que admitió que conforme se acerque el clima electoral le será muy difícil al oficialismo conseguir quórum y obtener algunas leyes. Ve a Sergio Massa candidato y anticipó una fractura en el bloque del Senado para 2017.

El presidente de la Cámara de Diputados, Emilio Monzó, justificó el envío del proyecto de Ganancias al Congreso a pesar de no tener los votos para aprobarlo, señalando que “primero había un compromiso electoral de que este tema se iba a tratar en el transcurso de este año; un compromiso con los otros bloques, que también lo poníamos en tratamiento y por eso íbamos postergando para otros temas que había mandado el Gobierno nacional”.

“No se especuló con un resultado en el Parlamento, donde siempre vamos a estar en riesgo, no es ahora con el tema Ganancias: siempre vamos a estar en riesgo”, puntualizó, recordando que Cambiemos cuenta solo con 87 diputados nacionales, por lo tanto “para comenzar la sesión ya necesitamos 50 diputados nacionales sentados”.

En ese marco, advirtió que a medida que vaya acercándose el clima electoral, “vamos a tener que acostumbrarnos a que las cosas van a ser mucho más forzadas. Especialmente en la Cámara de Diputados”. Y anticipó: “No va a ser un año fácil el 2017 desde el punto de vista parlamentario”.

Reconoció que este año hubo “una responsabilidad” de parte de oficialismo y oposición, pero en cambio el año que viene “va a ser muy difícil conseguir el quórum y va a ser muy difícil obtener algunas leyes”. Por eso consideró que “el Gobierno nacional este año tiene herramientas suficientes como para administrar el año que viene sin depender tanto del Congreso de la Nación”.

Entrevistado en El fin de la metáfora, de Radio 10, atribuyó las fuertes críticas del Gobierno nacional a Sergio Massa “al vértigo y las circunstancias”, y recordó que “en el Congreso de la Nación se dicen muchísimas cosas hacia el Gobierno, lo que pasa es que no trascienden, pero sin embargo no perdemos el eje con respecto a la responsabilidad que tiene dentro de las funciones que a cada uno le corresponde”. Aclaró que esta semana “fue muy buena; la anterior fue complicada”, y lo graficó en términos automovilísticos: “Banquineamos todos en la anterior, y esta semana volvimos todos, me parece, a la carretera que corresponde y a lo que espera la gente. Volvimos al diálogo, volvimos a trabajar juntos”.

Monzó celebró que los últimos días se acercaran posiciones y reconoció que “nos dimos cuenta que la semana pasada exageramos posiciones, todos, todos, y eso no era bueno para una ley que estaba esperando la sociedad”.

Respecto de la posición que adoptaron los gobernadores, aclaró que “no hubo látigo, no hubo chequera, hubo diálogo, conversación y por supuesto cierta firmeza que tuvo el Poder Ejecutivo Nacional, junto con los gobernadores, en cuanto a la responsabilidad que tienen de gobernar, en cuanto al costo fiscal que tiene esta ley”.

Con relación al Senado, Monzó observó que “hasta ahora era un cuerpo muy sólido, en el que no se veían fisuras, y sin embargo en las dos últimas sesiones estamos viendo cómo diferentes senadores de lo que era el gran bloque justicialista”. En ese sentido advirtió que el año que viene esas desaveniencias pueden derivar en una fractura del bloque.

Monzó rechazó que estuviera apostando al quiebre del peronismo, y aclaró que “estoy haciendo una descripción de lo que va a ocurrir el año que viene. El kirchnerismo, como espacio político, va a presentarse el año que viene, especialmente en los distritos donde tiene fortaleza, provincia de Buenos Aires, Santa Cruz, algunas otras provincias, y va a buscar legitimar a sus propios diputados para tener peso en el Congreso de la Nación. No lo veo cerca a la corriente justicialista más tradicional, que se va a inclinar hacia una línea de gobernadores. Ahí estoy hablando que puede haber una segunda fracción; y una tercera fracción, de origen justicialista, que es Sergio Massa. De hecho, ese paisaje ya lo tenemos en el recinto de la Cámara de Diputados, pero se va a extender al Senado y al resto del país”.

Luego se extendió recordando que “el peronismo es solidario con los ganadores”, por lo que interpretó que según el resultado se encolumnarán detrás del que mejor resulte en la elección. Pero vislumbró que “en 2019 vamos a tener un peronismo probablemente unido”.

Consultado sobre probables candidatos del peronismo en las próximas elecciones, imaginó a Sergio Massa presentándose, y lo citó como “el adversario más importante”. Estimó también que los intendentes de la provincia de Buenos Aires buscarán una alternativa filo-peronista, con Florencio Randazzo o un grupo de gobernadores, o jugarán con Sergio Massa.

Respecto de la relación con Jaime Durán Barba, aclaró que “no hay tensión con Durán Barba porque no hay vínculo con él”.

Al planteársele hacer un balance del primer año de gestión, Monzó consideró que “fue un muy buen gobierno para ser un año de transición. Es un año de aprendizaje, quizá nosotros mismos pusimos la vara muy alta y después la realidad te va poniendo en otro lugar”. “Pero sí ha sido un Gobierno con reacción, con errores, con aciertos, pero es un Gobierno bien aprobado”.

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