De botija, Carlos Sánchez era de Peñarol, rival que visita hoy al Tomba: “Si hago un gol, lo grito”, dice el yorugua.
En su país lo conocen como Carlos Andrés Sánchez Arcosa, nacido en Montevideo el 2 de diciembre de 1984, formado como futbolista en Liverpool ( Liverpúl , como se conoce a este club en Uruguay) pero sus primeros gustos futboleros, como botija, lo tuvieron como hincha de Peñarol.
Claro que en Mendoza lo conocen, simplemente, como Carlos Sánchez, una de las revelaciones del exitoso equipo que el Turco Asad llevó a la Copa Libertadores y una de las figuras del Godoy Cruz que ahora dirige el Polilla Da Silva, y que hoy buscará su segundo triunfo en el grupo 8 contra el Carbonero. “Desde chico me gustaba Peñarol, pero después empecé a jugar al fútbol y esa simpatía se me fue yendo. Ahora soy hincha de Godoy Cruz. Si hago un gol claro que lo voy a gritar, nunca jugué en Peñarol, sería lindo ganar”, anticipó.
Sabe el volante que, en el afán de hacerse fuertes de local, tendrán la chance de aprovechar un rival que fue vapuleado en su presentación copera. “Peñarol es un equipo que viene golpeado por la derrota con Independiente, esperemos que no se levante con nosotros. Queremos repetir lo que hicimos con la Liga ( NdeR: triunfo por 2-1) y seguir demostrando que este equipo puede dar más”, analizó.
Sánchez llegó el año pasado al Tomba y de inmediato se convirtió en eje del mediocampo. Y en este 2011 suma, en tres partidos entre Copa y Clausura, un rendimiento tan notable que su promedio Olé es de 8. “Me siento mejor, tengo más libertad en el juego para llegar al área, estoy pasando por un gran momento y hay que aprovecharlo”, admite y acusa recibo del cariño de la gente: “Siento mucho orgullo de ponerme la camiseta de Godoy Cruz. El otro día me emocioné cuando me ovacionaron. Y en cada partido trato de devolver el cariño que me brindan”.
Fuente: Olé