MILAN.- El primer ministro italiano, Silvio Berlusconi, comenzó ayer a enfrentar un verdadero maratón judicial que se prolongará durante por lo menos seis semanas y que lo llevará a comparecer hasta en cuatro ocasiones ante los jueces.
El proceso que comenzó ayer en Milán es por evasión fiscal del grupo mediático Mediaset. En él se acusa a Berlusconi y a su empresa de haber inflado los precios de los derechos cinematográficos con el fin de evadir impuestos y crear fondos de dinero negro en el exterior.
Como se preveía, Berlusconi no estuvo presente en el juzgado en el primer día del proceso y fue declarado en rebeldía.
El Tribunal de Milán tomó esta decisión después de que sólo aparecieran los abogados del primer ministro, Niccolò Ghedini y Piero Longo, sin presentar ninguna solicitud de legítimo impedimento para excusar la ausencia del mandatario.
La defensa del primer ministro ya había anunciado en los últimos días que no intentaría acogerse al legítimo impedimento, la norma que permite a Berlusconi y a sus ministros ausentarse de los juicios siempre que tengan que atender compromisos oficiales.
«Quiero ir [al juicio] como siempre; quiero ir. Son mis abogados los que lo impiden», se defendió el premier italiano.
Según Ghedini, Berlusconi tiene intención de presentarse en los tribunales el 11 de abril, fecha en que fue fijada la próxima vista.
El juicio por el caso Mediaset había quedado en suspenso en abril de 2010, cuando el gobierno de Berlusconi consiguió aprobar una controvertida legislación que concedía al primer ministro la inmunidad.
Sin embargo, el pasado enero el Tribunal Constitucional decidió que será el juez competente quien deba decidir si el jefe de gobierno puede no asistir a las vistas por cuestiones de su agenda política.
El maratón judicial del Cavaliere continuará el próximo sábado, con el inicio del caso Mediatrade, en el que Berlusconi está acusado de apropiación indebida y fraude fiscal.
Por otro lado, el 11 de marzo se reanudaría el proceso en el cual el Cavaliere está acusado de haber sobornado con 600.000 dólares a su abogado inglés David Mills para que mintiera a su favor en dos juicios.
El proceso más esperado y conocido, el caso «Ruby», comenzará el 6 de abril. En él se acusa a Berlusconi de prostitución de menores y de abuso de poder.
Agencias AFP Y EFE