La soja sufrió ayer su tercera jornada de baja consecutiva en el mercado de Chicago y cayó por debajo de la barrera de los u$s 500 por tonelada. La oleaginosa cerró en u$s 493,85, el menos valor en dos semanas, con una merma de poco más de 3% en tres días. En el mercado local, la baja se replicó con un retroceso de 2,9%.
La tendencia, que copiaron los demás granos, está lejos de reflejar una baja estructural del precio de los alimentos. Por el contrario, se espera que en su informe mensual, el Departamento de Agricultura de los Estados Unidos (USDA, por sus siglas en inglés) refleje hoy la estrechez de las existencias de granos en el mundo, en relación con la demanda de alimento.
En paralelo, según el especialista Ricardo Baccarin, la baja de los granos responde a la inestabilidad de la crisis en Libia. Al mercado no le gusta que suba el petróleo, ni la amenaza del aumento de los costos de fletes y demás productos, destacó.
Mientras el barril de petróleo Brent (de referencia para Europa) subió 2,4% por el recrudecimiento de los enfrentamientos en el país de Gadafi, el crudo en Estados Unidos bajó por el aumento de las reservas en ese país.
La soja lideró la caída generalizada de los commodities agrícolas ayer empujada también por los propios fundamentos del mercado granario. El avance de la cosecha sudamericana operó como factor bajista: las lluvias en la Argentina permitieron mantener las proyecciones de cosecha en 48,8 millones de toneladas según la Bolsa de Cereales de Buenos Aires, mientras que en Brasil la tregua de las precipitaciones permite que avance la recolección de una cosecha que se anticipa récord, por encima de las 72 millones de toneladas.
En el mismo sentido operó la liquidación de contratos por parte de los fondos, que esperan el informe de oferta y demanda que publicará hoy el USDA para reaccionar después a lo que ya anticipan. Seria una sorpresa que el informe no reflejara la estrechez de la oferta, opinó Baccarin.
Otro de los fundamentos del mercado es el comportamiento de la demanda china, aún incierto. Mientras algunos creen que la tercera economía mundial demandará menos granos este año porque posee reservas, otros analizan que comprará más para controlar un tema crucial: la inflación. De todas formas, resta ver aún la incidencia de la marcha general de la economía del gigante asiático.
Los resultados de ayer en el mercado de Chicago contrastaron las expectativas alcistas previas a la apertura, basadas en la actividad de los fondos tras las caídas observadas en los días previos.
El mercado local copió la tendencia, que se vio amplificada por las bajas de los días anteriores, que no habían sido asumidas debido a los feriados. La soja se despabiló del receso por carnaval con una baja de $ 40 por tonelada. Así el mejor precio conseguido por los vendedores en la tarde de ayer en el recinto de Rosario alcanzó los $ 1.350 por tonelada, aunque también hubo negocios por menos de ese valor. Las ofertas abiertas por la soja en el mercado disponible quedaron en $ 1.330, generando negocios por 5.000 toneladas según el portal FyO.com.
En el mercado disponible de maíz, los valores escuchados para la descarga corta quedaron en $ 760, operándose 7.000 toneladas, mientras que las ofertas bajaron a u$s 190 para la posición Junio 2011.
En lo que respecta al trigo, sólo hubo interesados en adquirir el de la categoría baja proteína y se pagó hasta los u$s 200.
Fuente: cronista.com