Aldana Crucitta (UCR-Ev) impulsó un proyecto para manifestar su “máxima preocupación y profundo repudio” al ataque que sufrió la diputada provincial durante un acto en Formosa.
Luego de que se viralizaran las imágenes en las redes sociales, la legisladora de la Unión Cívica Radical – Evolución (UCR-Ev) Aldana Crucitta presentó en la Legislatura de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires un proyecto de declaración para manifestar su “máxima preocupación y profundo repudio ante la brutal agresión sufrida” por la diputada provincial de la UCR, Agostina Villaggi, durante un acto de campaña en el barrio Lote 111 de la ciudad de Formosa.
En los fundamentos del texto, la radical aseveró que “la violencia política es una amenaza directa a la Democracia. Lo ocurrido durante un acto de campaña en el barrio Lote 111 de la ciudad de Formosa no sólo constituye un atentado contra la integridad física de una legisladora electa por el pueblo, sino también una muestra alarmante del deterioro institucional en la provincia de Formosa”.
“Es absolutamente inadmisible que en pleno siglo XXI haya dirigentes y militantes políticos que pretendan ‘territorializar’ los barrios como si fueran feudos personales, y que respondan con violencia a la sola presencia de voces disidentes. La intolerancia no puede ni debe tener lugar en nuestro sistema democrático”, continuó.
Luego de que se viralizaran las imágenes en las redes sociales, la legisladora de la Unión Cívica Radical – Evolución (UCR-Ev) Aldana Crucitta presentó en la Legislatura de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires un proyecto de declaración para manifestar su “máxima preocupación y profundo repudio ante la brutal agresión sufrida” por la diputada provincial de la UCR, Agostina Villaggi, durante un acto de campaña en el barrio Lote 111 de la ciudad de Formosa.
En los fundamentos del texto, la radical aseveró que “la violencia política es una amenaza directa a la Democracia. Lo ocurrido durante un acto de campaña en el barrio Lote 111 de la ciudad de Formosa no sólo constituye un atentado contra la integridad física de una legisladora electa por el pueblo, sino también una muestra alarmante del deterioro institucional en la provincia de Formosa”.
“Es absolutamente inadmisible que en pleno siglo XXI haya dirigentes y militantes políticos que pretendan ‘territorializar’ los barrios como si fueran feudos personales, y que respondan con violencia a la sola presencia de voces disidentes. La intolerancia no puede ni debe tener lugar en nuestro sistema democrático”, continuó.
Parlamentario.com