La modelo sigue conmocionada por la muerte de su amiga y colega Jazmín de Grazia.
Paula Chaves y Jazmín de Grazia se presentaron en el certámen de belleza «Super M» en 2002. Desde allí, sus caminos se unieron y las jóvenes se hicieron muy amigas. Compartieron infinidades de momentos laborales y personales.
Tras la noticia del fallecimiento de De Grazia, Chaves está invadida de encontrados sentimientos, dolor, tristeza, incertidumbre e impotencia. La recién coronada «Chica del verano» no encuentra consuelo y confesó haberla intentado ayudar a Jazmín en reitaradas oportunidad sin éxito.
Este fue el conmovedor mensaje que Paula puso en su cuenta personal de Facebook en honor a su amiga fallecida:
«La más rebelde, desquiciada, la más frontal, la que cuando me tuvo que agarrar un día y dejarme llorando lo hizo, solamente para verme sonreír de nuevo… loca como pocas, imposible olvidarme cuando nos fuimos a NY y nos peleábamos cada media hora… carácter fuerte y arrollador… pero una amiga de de fierro, que decía las cosas que dolían de la peor forma, pero yo sé que siempre lo hizo porque me amaba… intenté ayudarla mil veces, pero no me dejaba!!! Hoy se fue… te amo forra que te fuiste ahora. Gracias por todos los momentos!… Se que querés que te despidamos con música electrónica y alcohol, voy a tratar de hacer todo lo posible para que eso pase, por lo menos yo! JAMAS TE VOY A OLVIDAR! Y no te voy a poner descansá en paz, porque no tenías paz, jajajajaja… así que rockeala arriba también, y cuidame!!!! te amo amigaaaaaaaaaaaaaaaaaaa!»
Tratamiento psiquiátrico
Leandro Cabo Guillot, el novio de Jazmín, fue quien confirmó que la modelo se encontraba bajo tratamiento pisquiátrico y tomaba pastillas para poder dormir.
“Jazmín estaba en tratamiento psiquiátrico, tomaba pastillas para dormir, le costaba dormir. Era muy exigente con ella misma, ella tenía que dar todo. Era atormentada, no se la veía correctamente. Haber perdido su trabajo en ‘Duro de Domar’ fue muy difícil para ella», contó.
Y agregó: «Era una persona que iba mucho más rápido y sufría con muchas cosas, entre ellas las exigencias de lo que calificó como ‘una sociedad oscura’ y no podía dejar de lado sus códigos.
Minuto Uno