En una charla que tuvo lugar en el salón Delia Parodi, el ex juez español cargó contra las instituciones que “han acudido a esta práctica de manera permanente”, mientras que el ministro de la Corte remarcó la necesidad de “estabilizar el Estado de derecho” garantizando la redistribución del ingreso.
En la primera de una serie de conferencias, el ex juez español Baltazar Garzón, el ministro de la Corte Suprema de Justicia Eugenio Zaffaroni y el diputado nacional Remo Carlotto (FpV) remarcaron la necesidad de combatir la tortura a 200 años de la Asamblea General Constituyente de 1813, que abolió esta práctica.
El evento fue abierto por Carlotto, presidente de la Comisión de Derechos Humanos de la Cámara baja, quien recordó la sanción, el año pasado, del Mecanismo Nacional contra la Tortura para las personas privadas de su libertad.
En este sentido, el legislador llamó a “llevar adelante la lucha contra la tortura en forma permanente” y cuestionó la actuación de la Justicia en muchas de estas causas, vinculadas a crímenes de lesa humanidad.
Por su parte, Zaffaroni consideró que la Asamblea del año XIII significó “el inicio del deseo de establecer límites a los abusos de poder” y consideró, desde una perspectiva económica, que “los derechos humanos se enfrentan hoy con la necesidad de estabilizar el Estado de derecho y de adaptar el aparato jurídico a las necesidades de redistribución del ingreso”.
“El primer derecho humano sigue siendo aquel por el que lucharon nuestros próceres: el del desarrollo progresivo”, sostuvo el ministro de la Corte.
En tanto, Garzón opinó que “las instituciones han acudido a la práctica de la tortura de manera permanente”, con lo cual “el propio Estado devela su falta de consistencia”. Ejemplificó en esta línea que “la Iglesia ha inventado la máquina de tortura más impresionante” a través de la Santa Inquisición.
“Cuando las instituciones se ven impotentes acuden a la degradación del ser humano”, insistió el ex juez español, quien reconoció que su país “está en deuda” con los ciudadanos “que han tenido que migrar para buscar justicia en Argentina”.
Justamente, el evento contó con la presencia de Darío Rivas, primer querellante en nuestro país por los crímenes del franquismo, quien fue largamente aplaudido. También asistieron las diputadas nacionales del Frente para la Victoria Diana Conti, María Elena Chieno, Liliana Ríos y María Inés Pilatti Vergara.
Fuente: Parlamentario