Una copiosa lluvia de 60 milímetros cayó en pocas horas en Comodoro Rivadavia y dejó al menos unas 50 personas damnificadas entre evacuados y autoevacuados. El estado de emergencia obligó, además, a la suspensión de las clases en el turno tarde y había alerta por aludes.
Bomberos y policías debieron socorrer a los pobladores de los barrios alejados en una tarea complicada por el estado de las calles, convertidas en ríos. Fuentes policiales informaron que había alerta vigente por aludes desde los cerros aledaños a la ciudad. Desde Defensa Civil no confirmaron la versión, pero sí que hubo desmoronamientos y que los principales damnificados son habitantes de asentamientos ilegales en las laderas. En 2010, un alud causó la muerte de tres personas.
El Ministerio de Educación de Chubut suspendió las clases en todas las escuelas en el turno tarde, a la espera de que mejoren las condiciones meteorológicas, algo que recién ocurriría entre hoy y mañana. De hecho, nuevas precipitaciones complicaron más la situación y el servicio de transporte urbano de pasajeros debió ser interrumpido.
Ayuda nacional. El ministro del Interior, Florencio Randazzo, se reunió ayer con el intendente electo de Comodoro, Néstor Di Pierro, por la situación en la ciudad. “Por pedido de la Presidenta nos pusimos a disposición en todo lo que esté a nuestro alcance para llevar soluciones a los afectados por este fenómeno climático”, subrayó Randazzo. Durante la reunión en Casa de Gobierno, también dialogó telefónicamente con el actual intendente de Comodoro, Martín Buzzi, para “trabajar en conjunto en un plan de emergencia”.
Fuente: Día a Día