Ya en la recta final del certamen y con sólo 10 parejas en camino a la final, el show más visto de la televisión argentina debería estar transitando su momento más álgido. Sin embargo, la noche del lunes pasó sin pena ni gloria, por lo menos en lo que al concurso se refiere. El ritmo no ayuda a generar expectativa; el aerodance no implica grandes despliegues ni polleritas cortas y es un hecho que el baile raso no forma, por sí mismo, grandes adhesiones.
A pesar de todo, Marcelo Tinelli siempre se las arregla para hacer un show de la nada misma, y es así que en esta gala Peter Alfonso pasó a ser el gran protagonista de una noche que podría haber estado tranquilamente destinada al olvido. Pero Marce no da puntada sin hilo y el minishow con la ayuda del tibio carisma del productor enamorado de Paulita Cháves terminó dando sus frutos con unos 35.4 puntos de rating alrededor de las 23.30. Por si alguien todavía dudaba del verdadero origen del rating Tinelliano, ha quedado más que claro que los puntos del Bailando son, nada más y nada menos, que de su creador. Sea quien sea quien que esté sentado en el banco del jurado.
Hablando del jurado, tras la presentación de rigor de la mesa evaluadora, la noche nos encontró con una Graciela Alfano desconocida; emocionada como nunca la ex vedette agradeció a Sábado Show por el sentido homenaje que le brindaron el pasado fin de semana.
Virginia Gallardo llegó entonces dispuesta a abrir la gala del aerodance. Pero Marce aprovechó la partida para sacarle unos cuantos comentarios sobre su ex y la ex de su ex; “¿Sabías que Fort se compró una Lamborghini Gallardo?”, consultó en tono irónico el conductor. “Me estoy enterando, es un lindo auto seguramente”, contestó Vir, jugando a estar absolutamente desentendida del asunto.
Con respecto al revuelo mediático generado la pasada semana la rubia tampoco quiso poner más leños a la fogata, pero igualmente tiró algunos dardos al voleo, así como quien no quiere la cosa: «Yo tuve con Ricardo todo lo que tiene que tener una pareja. No me avergüenza haber sido su novia. Igual, ya dije lo que tenía que decir, no voy a hablar de Violeta ni de sus declaraciones. No salgo a los medios para tener más prensa o más cámara, nada más lejos que eso», tiró Virginia, en clara alusión a los paseos mediáticos de su antecesora en el corazón de Ricky.
Flavio Mendoza apareció entonces con sus habituales cachondeos hacia el conductor. Mientras le robaba un pico, una Campanita patinadora giraba alrededor de los dos en la pista. El en baile, Flavio y Gisela volvieron a sorprender y obtuvieron 36 puntos.
Luego y con motivo de promocionar el Soñando por bailar, invitó primero a Hoppe y poco después a Peter Alfonso a que se sumaran a las bailarinas en la pista.
Después, Peter hizo la coreo de Soñando para bailar y le salió bastante bien. «Te voy a presentar como una figura», aseguró Marcelo, mientras Peter se encaminó hacia detrás de escenario «Fuerte el aplauso para el Señor Peter Alfonso», anunciaba Marcelo.
El productor ingresó al estudio con una confianza sorpresiva y se fundió con Marcelo en un abrazo. «Es una emoción enorme para mí. Soy un chico de barrio que la remó. Es un sueño para mí participar del Bailando 2011», confesó Peter.
Moria, por su parte, lo llenó de halagos y dio a entender que era lo más parecido al hombre perfecto. Mientras tanto, también probaron suerte con la coreo Joaquín Starsosta y el negro de Zaire, que no fueron capaces de seguir los pasos.
Así concluía una noche muy particular, dejando pendiente nuevamente el ritmo sin finalizar la ronda. Habrá mucho más Bailando 2010 en la noche del martes de El Doce.
Fuente: La Voz