Cuando falta poco más de un mes para los comicios en la Ciudad, sorprende que el candidato a primer legislador Aníbal Ibarra no haya iniciado su campaña por las calles, ni tampoco en los medios. En el oficialismo nacional analizan que el ex Jefe de Gobierno teme ser denunciado por Fabiana Fizbin, la funcionaria de Habilitaciones, que según un fallo reciente, podría ir a prisión por la causa Cromagnon. “Sobre Aníbal Ibarra pesa ahora la Justicia, por eso el silencio”, aseguran en el kirchnerismo porteño. Es que resulta sorpresivo que a poco menos de un mes de las elecciones, el primer candidato a legislador por el Frente Progresista y Popular no haya iniciado su campaña en la Ciudad.
Según pudo saber LPO, días pasados, el dirigente contrató a una consultora para que le diseñe una estrategia mediática «relámpago», que sólo será en puesta en marcha en los últimos siete días previos al 10 de julio.
Es que para el ex Jefe de Gobierno, el panorama cambió abruptamente dos semanas atrás, cuando la Cámara de Casación reintrodujo a la ex funcionaria ibarrista Fabiana Fizbin en la causa Cromagnon, condenándola a 4 años de prisión de cumplimiento efectivo.
Ante la posibilidad concreta de terminar en la cárcel –su apelación ya llegó a la instancia de la Corte Suprema- la ex responsable de Habilitaciones salió de las sombras en que se encontraba sumida y en entrevistas concedidas a los diarios Clarín y La Nación, afirmó: «El único que podía cerrar los boliches era Aníbal Ibarra». También aprovechó para cargar contra la hermana del actual candidato a diputado por la Ciudad: “Mi relación con Vilma Ibarra quedó resentida, ella me llevó por primera vez a trabajar en la Cámara de Diputados. Ella sigue en política y yo no”, puntualizó.
Fiszbin era subsecretaria de Control Comunal en el momento en que ocurrió el incendio de Cromagnon en el que murieron 194 personas. O sea, la fiscalización de ese tipo de establecimientos estaba a su cargo.
Fuente: lapoliticaonline.com