El domingo se vota en el club de la Ribera. El candidato de Macri, Angelici, busca destronar a Ameal, amigo de Scioli.
Como pocas veces ocurre, el fútbol esta vez pasó a un segundo plano. Y llamativamente, cuando Boca se está por consagrar campeón argentino después de tres años, la atención fue desviada hacia las elecciones en el club, donde la eterna disputa entre el Gobierno Nacional y el de la Ciudad sumará un nuevo capítulo.
¿Qué tiene que ver el conflicto en las elecciones de Boca? Aunque cueste creerlo, mucho. Es que Jorge Amor Ameal, actual presidente del club y candidato por el oficialismo, es íntimo amigo de Daniel Scioli y además tiene una fuerte relación con el Gobierno.
Pero claro, la oposición presenta a Daniel Angelici, el candidato de Mauricio Macri, quien presidió el club durante varios años y que pretende volver a meterse por intermedio del hombre con quien trabaja desde 2003.
En un principio, las fuerzas a presentarse iban a ser más, pero tanto José Beraldi como Roberto Digón, que en antes iban a encabezar sus propias listas, decidieron aliarse a Ameal, al ver la fuerte influencia de Macri en los votantes y el poder que el Jefe de Gobierno le dio a un Angelici que, en un principio, encabezaba ampliamente las encuentas.
Ante esto, al tridente Ameal-Beraldi-Digón se lo comenzó a vincular con el Gobierno Nacional y así las encuestas comenzaron a ser más parejas, a punto tal que, a sólo tres días de la elección, no existe un favorito. Todo es muy cerrado.
Pero se tornó aún más polémico cuando se supo que Boca podría salir campeón este mismo fin de semana, justo el de la elección. A partir de ese momento, Ameal y su gente intentan hacer todo lo posible para que Tigre, el único que puede demorar la consagración de Boca, juegue un día antes y así, de no ganar el Matador, las elecciones se llevarían a cabo con el Xeneize campeón, lo que sería una inyección fundamental para las aspiraciones de Ameal de una reelección.
Por eso, la definición del día y el horario del partido entre San Lorenzo y Tigre (aún incierto) es el último capítulo de una historia que parecía no tener fin. Recién el domingo se sabrá quién gana este round. Si Angelici o Ameal; si Macri o Scioli. Hagan sus apuestas.
Minuto Uno