El presidente de la Cámara Argentina de la Construcción, Carlos Wagner, denunció que el sector perdió 30 mil empleos por el cepo cambiario y la crisis internacional. “Hay que ver la película y no la foto”, le respondió la presidenta, durante una Convención organizada por esa entidad. «Si las medidas hubiesen sido tan desastrosas como dicen» los resultados hubieran sido peores, aseguró.
Cristina volvió a protagonizar un polémico episodio con empresarios, con quienes sigue manteniendo relaciones tirantes. Esta vez fue durante la 60º Convención Anual de la Cámara de la Construcción, el presidente de esa entidad Carlos Wagner afirmó que el sector perdió unos 30 mil puestos de trabajo como consecuencia de una menor actividad económica.
«Perdimos una buena cantidad de puestos de trabajo, más o menos 30.000», indicó Wagner al hablar con periodistas en el Hotel Sheraton. «Tuvimos un buen primer trimestre, en el segundo caímos un 2 por ciento, ahora estamos en una meseta», explicó el empresario.
Wagner argumentó que tanto la crisis internacional, los controles cambiarios implementados por el Central «para asegurar el pago de la deuda» y la desaceleración de Brasil «impactaron fuertemente en el mercado inmobiliario, que ha tenido una importante retracción, afectando a nuestro sector, que aún cuando opera fundamentalmente en la economía interna vio reducir su demanda en el sector privado».
«Ahora se observa una tendencia a la estabilización en los últimos meses, y una caída en permisos de construcción en los 42 municipios relevados por Indec del 9,5 por ciento», apuntó.
Además resaltó que este año «finalizará con un consumo de cemento inferior al consumo récord registrado en 2011, por lo que al final del 2012 esperamos haber consumido y transformado en obras alrededor de 11,5 millones de toneladas de cemento», detalló.
Sin embargo, se mostró optimista respecto al 2013. «El año que viene tenemos un buen presupuesto para obra pública, por eso pensamos que vamos a recuperar los puestos de trabajo», aseguró.
La réplica de Cristina
En su turno, la presidenta se encargó de matizar los dichos de Wagner, aunque cargando las causas sobre la crisis mundial que se recrudeció a lo largo del año.
«La crisis mundial nos ha traído meses de contracción, pero no hay que detenerse en la foto, sino ver la película completa de los 10 años, donde el crecimiento de la construcción fue exponencial», le recordó Cristina en un tramo de su extenso discurso.
«Se perdieron sólo 587 puestos de trabajo sobre un total de 87.300 trabajadores registrados”, con lo cual señaló que ese resultado debiera haber sido mucho mayor «si las medidas hubiesen sido tan desastrosas como dicen».
La presidenta añadió que en la construcción la pérdida de puestos de trabajo fue de 3,3 por ciento, que equivale a los 30 mil puestos de empleo a los que aludió Wagner.
En ese sentido, remarcó que el sector «creó 300 mil puestos de trabajo y creció un 300 por ciento respecto de 2003».
Luego abogó hoy por un «reacomodamiento» de la actividad de la construcción, con la adopción de «nuevos parámetros culturales», en referencia al propósito oficial de desdolarizar las operaciones en el sector.
Cristina puntualizó que «la actividad inmobiliaria no es lo mismo que la construcción» y destacó que «todos los insumos se producen en el país y se pagan en pesos, ni hablar de la mano de obra». Por eso consideró que la actividad tiene «un claro contenido patriótico».
Elogio a la FED
La Presidenta citó un par de párrafos de la presentación que hizo la FED neoyorkina sobre su alerta al juez, en relación a que un eventual pago a los litigantes podría no sólo perjudicar a los acreedores que ingresaron al canje de deuda, sino también a «a todo el sistema de pagos».
Así, volvió a cargar otra vez contra los fondos buitres que quedaron afuera del canje de deuda, a los que criticó por criticó con dureza por estar «buscando un default técnico». «Los holdouts apuestan a que el país no va a pagar. Creo que están buscando un default técnico», vaticinó.
Fuente: La Política Online