El presidente estadounidense pidió a su equipo de seguridad que estudie opciones para ayudar al país árabe a combatir el avance del grupo islamista Estado Islámico de Irak y el Levante.
El presidente estadounidense, Barack Obama, dijo hoy que no volverá a enviar tropas a Irak pero que pidió a su equipo de seguridad que estudie opciones para ayudar al país árabe a combatir el avance del grupo islamista Estado Islámico de Irak y el Levante (EIIL).
En declaraciones en la Casa Blanca, Obama dijo que el conflicto no se solucionará sólo con medidas militares y que es necesario que el gobierno iraquí inicie un proceso político que contemple los intereses de todas las comunidades para poder superar las tensiones sectarias que alimentan el enfrentamiento.
Obama señaló que la amenaza desde el Estado Islámico de Irak y el Levante, o ISIL, «no es sólo ni principalmente un desafío militar», aunque él llamó ISIL una «organización vicioso.»
«Esto representa un peligro para Iraq y su pueblo, y dada la naturaleza de estos terroristas, que podría representar una amenaza, finalmente, a los intereses estadounidenses, también», dijo Obama.
El presidente dijo que ha pedido a su equipo de seguridad nacional para ofrecer una serie de opciones sobre cómo los EE.UU. puede ayudar, pero dijo que le toca a la gente de Irak «como una nación soberana» para resolver los problemas.
«Los EE.UU. va a hacer nuestra parte. Pero entender que en última instancia depende de los iraquíes, como nación soberana, para resolver sus problemas», dijo Obama.
«Nadie va a beneficiarse de ver Irak desciende en el caos», agregó Obama.
CHIITAS
El máximo líder religioso chiita de Irak llamó a los iraquíes a tomar las armas para defender al país, horas después que insurgentes islamistas que esta semana conquistaron gran parte de las regiones sunnitas del país tomaran dos localidades en una provincia multiétnica al noreste de Bagdad.
Ante el alarmante avance relámpago de los islamistas sunnitas del Estados Islámico de Irak y el Levante (EIIL) -que sumió a Irak en su peor crisis desde la retirada de las tropas estadounidenses-, Irán, un país chiita vecino a Irak, indicó hoy que está dispuesto a enfrentar la creciente amenaza al otro lado de su frontera oeste.
Penetrando hacia el sureste del país luego de haber tomado la gran ciudad norteña de Mosul y más tarde Tikrit, la localidad donde creció el ex presidente Saddam Hussein, combatientes del EIIL capturaron hoy dos ciudades en la provincia de Diyala, fronteriza con Irán.
Fuentes policiales dijeron que los islamistas ingresaron a bordo de camionetas 4X4 con ametralladoras montadas tanto en Saadiyah, 95 kilómetros al norte de Bagdad, y Jalawla, 125 kilómetros al noreste de la capital, luego de que el Ejército iraquí abandonara sus puestos sin ofrecer resistencia.
En Ginebra, la ONU dijo hoy que el número de las personas muertas en los últimos días en Irak sería de varios cientos, mientras que los heridos son alrededor de mil.
El EIIL amenazó ayer con marchar sobre Bagdad, pero, con su gran población chiita, sería una presa mucho más difícil que las localidades de la zona central sunnita que ha tomado, donde abunda el resentimiento hacia el gobierno chiita del primer ministro Nuri Al Maliki, al que la minoría sunnita acusa de discriminación.
En Bagdad, el EIIL enfrentaría mucha mayor resistencia, no sólo del Ejército sino también de milicias chiitas.
Hoy, el representante del gran ayatollah Ali Al Sistani, la máxima autoridad religiosa chiita de Irak, dijo en su sermón que los iraquíes tienen la obligación cívica de enfrentar al EIIL.
«Los ciudadanos que puedan portar armas y luchar contra los terroristas en defensa de su país, su gente y sus lugares sagrados, deberían enrolarse en las fuerzas de seguridad como voluntarios», dijo el clérigo jeque Abdul-Mahdi al-Karbalaie, informó la cadena de noticias CNN.
El clérigo radical chiita Muqtada al-Sadr, uno de los más influyentes del país, y la milicia chiita Asaib Ahl al-Haq, prometieron esta semana defender los sitios sagrados, lo que podría derivar en una recaída en la violencia sectaria que en 2006 y 2007 dejó al país al borde de la guerra civil.
En Irán, la agencia de noticias estatal IRNA informó hoy que ex miembros de la poderosa Guardia Revolucionaria del país anunciaron su disposición a pelear en Irak contra el EIIL, mientras que la TV estatal dijo que el presidente Hassan Rohani afirmó que su país hará todo lo que esté a su alcance para ayudar a Bagdad.
«La República Islámica de Irán invertirá todos sus esfuerzos a nivel internacional y regional para enfrentar el terrorismo», le dijo Rohani a Al Maliki en una comunicación telefónica.
La creciente crisis ha empujado a la nación de más de 31 millones de habitantes hacia un precipicio, y hay crecientes temores de que provoque una partición territorial del país entre chiitas, sunnitas y kurdos, la tercera mayor comunidad del país.
Ayer, fuerzas de seguridad de los kurdos, que por ahora son aliados de los chiitas, tomaron la norteña ciudad de Kirkuk para ocupar el vacío de poder dejado por el Ejército.
El presidente estadounidense Barack Obama dijo ayer que se necesitan «acciones militares inmediatas» para ayudar a Irak y que su gobierno no descarta ninguna opción, aunque no dio detalles.
La cadena de noticias CNN informó, citando a funcionarios, que Obama evalúa ataques en Irak con aviones no tripulados (drones).
Hoy, el secreatrio de Estado norteamericano John Kerry dijo hoy en Londres que Obama adoptará medidas «en el momento oportuno», al tiempo que insistió en que el EIIL es una amenaza para Occidente y para todo Medio Oriente, «incluyendo a Irán».
El súbito agravamiento del conflicto en Irak también comenzó a provocar una crisis humanitaria, y la ONU dijo ayer que al menos 300.000 personas se vieron desplazados de Mosul luego de que cayera en manos del EIIL, el martes pasado.
Hoy, el Alto Comisionado de la ONU de Derechos Humanos, Rupert Colville, dijo en Ginebra que el organismo estima que los combates de esta semana causaron «cientos de muertos y 1000 heridos», informó la agencia de noticias EFE.
Colville denunció que también se registraron asesinatos extrajudiciales y ejecuciones sumarias, y citó el caso de un número indeterminado de soldados iraquíes capturados en Mosul y que fueron posteriormente ejecutados por el EIIL.
El funcionario afirmó también que las fuerzas gubernamentales de Irak bombardearon zonas residenciales y causaron numerosos muertos, incluidos unos 30 civiles.
Fuente: www.infonews.com