A un día de su presentación ante el Senado, el candidato del Gobierno para la Corte Suprema de Justicia negó haber militado en La Cámpora y en Justicia Legítima y reconoció su paso por la UCR. Admitió tener una “relación personal con el papa Francisco».
A poco de su presentación en el Senado, donde deberá contar con acuerdo para su designación como miembro de la Corte Suprema de Justicia, Roberto Carlés aseguró que “nunca” fue “kirchnerista” y reconoció su “relación personal con el papa Francisco».
Mientras el arco opositor mantiene el compromiso de no prestarse para la designación de un nuevo juez supremo para lo que queda del mandato de Cristina Kirchner, el jurista aclaró: «nunca fui kirchnerista. Apenas se anunció mi postulación se dijo que era militante de La Cámpora y de Justicia Legítima. Nunca lo hice. He tenido militancia, sí. El día que cumplí 18 años me afilié al radicalismo. Luego de la crisis de 2001 participé de la experiencia inicial de lo que fue ARI».
Pese a todas las críticas de la oposición, que se potenciaron luego de que expresara públicamente que «la prisión perpetua es inhumana», Carlés no se resigna a quedarse afuera de la Corte Suprema: «Eso está en manos de la política. Quizá después de escucharme cambien el voto», dijo sobre la reunión de la Comisión de Acuerdos de este martes.
Desde que el Poder Ejecutivo lo propuso como candidato a integrar el máximo tribunal de Justicia, se hizo hincapié en la amistad de Carlés con la papa.
«Tengo una relación personal con el papa Francisco», reconoió el jurista en declaraciones al diario La Nación. «Para mí es un referente espiritual, una persona que ha estado muy cerca de mí en momentos difíciles. Y me ha invitado a participar de actividades vinculadas con mi especialidad, como el encuentro con la Comisión Internacional contra la Pena de Muerte», apuntó.
De todos modos, Carlés trató de relativizar el efecto político-judicial que puede tener ese vínculo e intentó dejar en claro que no quiere sacar provecho de él: «Yo le pregunté si era conveniente ir a este último encuentro y me dijo que sí, pero creo que el problema lo tenemos nosotros, que sobredimensionamos todo lo que hace el papa».
El candidato a la Corte desmintió además una información que surgió al día siguiente de haber sido postulado por el Gobierno nacional: circuló que hace un par de años, a través de su cuenta de Twitter, cuestionó la figura del actual sumo pontífice al señalar que «nunca trabajó».
«No recuerdo haberlo escrito, como tampoco muchos de los tuits que aparecieron y anduvieron dando vueltas por ahí. De hecho, sabemos que hay gente que se dedica a hacer trabajos sucios», se desligó. «¿Si se lo aclaré al papa? De las charlas personales con él no voy a decir nada», concluyó.
Fuente: www.parlamentario.com