En 2010 casi 62% de las ventas de crudo venezolano fueron a Norteamérica. El principal consumidor de petróleo del mundo, Estados Unidos, fijó ayer una serie de metas en cuanto a su matriz energética, y que deben concretarse para el año 2025.
«Estoy fijando un nuevo objetivo, que es razonable, posible y necesario. Cuando fui elegido en noviembre de 2008, Estados Unidos importaba 11 millones de barriles de petróleo por día. En poco más de 10 años, habremos reducido ese monto en un tercio», dijo Barack Obama, presidente de EEUU.
«No podemos seguir de una conmoción en otra sobre la cuestión de la seguridad energética, corriendo a proponer medidas cuando suben los precios de la gasolina y después olvidándonos cuando vuelven a caer», señaló, según AP.
Según las cifras del Departamento de Energía del gobierno estadounidense, en 2010 el país del Norte importó 9,16 millones de barriles diarios de petróleo crudo. De cumplir la meta, para el año 2021 Washington podría ubicar sus importaciones en un volumen alrededor de los 6,05 millones de barriles de crudo, cifra no vista desde 1992.
Relación venida a menos
El Gobierno norteamericano indica que en 2010 Venezuela fue el quinto proveedor de petróleo crudo de EEUU, por detrás de Canadá (con casi 2 millones de barriles diarios) México, Arabia Saudí y Nigeria.
Pero en cambio, Norteamérica fue el principal país de destino para el crudo venezolano. La memoria y cuenta 2010 de Pdvsa señala que 61,7% de las exportaciones de crudo y crudo mejorado de Pdvsa se destinaron a Norteamérica, un volumen equivalente a 1,19 millones de barriles diarios.
Además de ser el principal cliente en cuanto a volumen, la comercialización de petróleo a EEUU se traduce en pagos en efectivo que alivia el atribulado flujo de caja de Pdvsa; a diferencia de las ventas financiadas a través de convenios como Petrocaribe, pagaderos en 25 años o con intercambio por productos como alimentos o médicos; o convenios como el Fondo Chino, en el que Venezuela ha comprometido volúmenes de producción petrolera a cambio de líneas de crédito con entes financieros de China.
Entre varios puntos, el proyecto energético anunciado por Obama prevé que EEUU invierta en refinerías a partir de biotecnologías, y desarrolle nuevas normas de ahorro de combustible y de emisiones de gases de efecto invernadero.
Fuente: eluniversal.com