El servicio de subterráneos de la línea B continúa sin llegar a las dos estaciones recientemente inauguradas, debido a un conflicto con los trabajadores. Los metrodelegados aseguraron que seguirán con el servicio reducido y confiaron en «llegar a un acuerdo» con Metrovías el martes, cuando retomen las negociaciones con la empresa.
Asimismo, insistieron en que «existe peligro de vida» en la nuevas estaciones de la red (Echeverría y Rosas) que fueron inauguradas días atrás, por lo que pidieron que un ingeniero de la empresa y uno del sector analicen las condiciones del servicio.
El Jefe de la Asociación Gremial de Trabajadores del Subte y el Premetro (AGTSyP), Roberto Pianelli, adelantó el domingo que continuarán con el servicio limitado entre las estaciones Alem y la terminal De los Incas «hasta que no se solucionen los problemas».
«Son problemas graves que tienen que ver con el riesgo eléctrico, que produce riesgos de vida que tiene que ver con alta tensión», explicó Pianelli.
En este sentido, denunció que el viernes, un trabajador «se electrocutó en el taller San José, de casualidad no hubo una nueva desgracia».
El martes, los trabajadores se volverán a reunir a las 10 con la empresa Metrovías, en lo que constituirá el cuarto encuentro desde la inauguración de las estaciones cuestionadas, inauguradas por el Jefe de Gobierno porteño, Mauricio Macri, el viernes 26.
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