Luego de que LPO revelara que en el bloque del PRO se estaban sacando los ojos por el reparto de oficinas, el vicepresidente primero del parlamento porteño les envió una carta a todos los legisladores advirtiendo que él decidirá adónde va cada diputado tras el recambio de diciembre. Le tienen que dar las llaves y un inventario de los muebles y computadoras.
Cristian Ritondo decidió ponerle fin a la guerra que se desató dentro del bloque del PRO en la Legislatura porteña por el reparto de los despachos que los legisladores ocuparán tras el recambio de bancas de diciembre.
LPO explicó ayer que los legisladores del PRO ya tuvieron cruces por ver quién ocupa los despachos más codiciados del Palacio Legislativo. La pelea mayor se dio por la oficina de Bruno Screnci, que en diciembre pasará al Ejecutivo.
Esa oficina tiene cochera y está en planta baja y ya la pidieron varios legisladores. Entre ellos Federico Salvai, la mano derecha de la vicejefa porteña María Eugenia Vidal, y otro diputado que apareció por el despacho con un metro para medir los muebles. Pero finalmente la ocupará Ritondo para reuniones.
Para terminar con las rencillas, esta mañana Ritondo, que es el vicepresidente primero de la Legislatura, les envió una carta a los 60 legisladores de la Ciudad exigiéndoles que le entreguen las llaves de todos los despachos.
El vice primero será quien defina el reparto de las oficinas y terminará con la costumbre que tienen los legisladores salientes de “negociar” los despachos con aquellos diputados que hacen su ingreso a la Legislatura.
Además de las llaves, los legisladores deberán entregar un inventario con los muebles y computadoras que tiene cada despacho para que luego del recambio no falte nada. De todos modos, el rabino Sergio Bergman ya le hizo saber al bloque del PRO que la pochoclera que hizo instalar en su despacho se la llevará al Congreso.
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