El sindicato del líder de la CGT oficialista Antonio Caló logró a fines de marzo un aumento anual en los sueldos básicos del 26,5%, después de un acuerdo realizado a medida de lo que se sugirió desde la Casa Rosada a los gremios aliados: que no superara el 30%. Sin embargo, casi 2 meses después, notaron que «se quedaron cortos». Caló dice que su huelga de 24 horas no tiene nada que ver con la que Hugo Moyano ratificó para mañana. Así comienza la medida en el sector siderúgico, con una «casualidad y una coincidencia».
Lleva dos semanas el tironeo entre la UOM y las siderúrgicas. El conflicto llegó al ministro de Trabajo, Carlos Tomada, quien dictó hace tres semanas la conciliación obligatoria, instancia que ya caducó.
CIUDAD DE BUENOS AIRES (Urgente24) La Unión Obrera Metalúrgica (UOM) paralizará hoy por 24 horas la producción de la industria siderúrgica en reclamo de un incremento salarial del 30%, similar al acordado por el gremio con otras seis cámaras del sector metalúrgico, en el marco de un conflicto que enfrentará al máximo referente del sindicalismo oficialista, Antonio Caló, y a un poderoso grupo de empresas encabezado por Ternium y Tenaris, del holding Techint, y Acindar, controlada por ArcelorMittal.
La medida de fuerza fue anunciada ayer por la conducción de la UOM a través de una solicitada, en la que el gremio acusó a las empresas agrupadas en la Cámara Argentina del Acero de no cumplir con el aumento salarial acordado. Pero desde la entidad empresaria dijeron que se ofreció aplicar sobre los básicos de convenio el mismo aumento acordado con el resto de las cámaras y atribuyeron el conflicto a la intención de la UOM de que esa suba se replique también sobre los adicionales remunerativos que en el sector se negocian a nivel de empresas, reclamo que es resistido por la siderúrgicas.
La actividad tiene adicionales muy específicos que dependen de la tecnología y la productividad de cada empresa. «Un convenio único con esos adicionales es impracticable», indicaron fuentes de la cámara al diario ‘El Cronista’.
La profundización del conflicto derivó ayer en especulaciones sobre un supuesto trasfondo político detrás de la discusión por salarios en el sector. Desde el propio entorno de Caló recordaron las diferencias públicas entre la administración de Cristina Fernández y el Grupo Techint y advirtieron: esperemos que esto no esté relacionado con el apoyo de la UOM al Gobierno.
A la vez, la medida de fuerza de los metalúrgicos se concretará un día antes de la movilización a la Plaza de Mayo que convocó el sindicalismo opositor, encabezado por Hugo Moyano y Luis Barrionuevo. «La cercanía temporal o la coincidencia es pura casualidad: nada tiene que ver nuestro reclamo con el de Moyano. Lo de ellos es una movida política, lo nuestro es en defensa de los intereses metalúrgicos», se esforzó en despejar cualquier duda un jerárquico de la UOM en diálogo con el diario ‘La Nación’.
«(Las empresas) no quieren reconocer ni el nuevo sueldo básico ni los adicionales, y la verdad que cuando vamos al supermercado nos cuesta todo más y no alcanza el salario», dijo ayer Abel Furlán, secretario de prensa de la UOM a la agencia ‘Noticias Argentinas’. El dirigente agregó: «El salario de los trabajadores siderúrgicos se compone del básico, más un salario conformado por adicionales que se pactan con las empresas. Las siderúrgicas más grandes del país, que son las que ganaron más plata, son las que se niegan a pagar el aumento acordado en paritarias».
La huelga dispuesta para hoy por el gremio metalúrgico paralizará la producción de las empresas Ternium-Siderar, Tenaris-Siderca, Acindar, Aceros Zapla, Sipar-Gerdau y AcerBrag, lo que afectará la provisión de insumos de aceros a otros sectores fabriles, como la industria automotriz, autopartista, petrolera, construcción y línea blanca, entre otras.
No obstante, la dirigencia de la UOM alertó que, si durante los próximos días no se logran avances significativos para destrabar la negociación salarial, profundizarán las medidas de fuerza desde la semana venidera. El aumento que reclama el gremio beneficiará a 16.000 operarios empleados por la siderúrgica, que en la actualidad perciben salarios promedio en torno a los $14.000, bastante por encima de los sueldos del resto de la actividad metalúrgica.
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