La presidente Cristina Fernández fue explicita: «Si no tuviéramos IVA y Ganancias no alcanzaba para que los jubilados y pensionados tengan el nivel de jubilaciones y pensiones que tienen hoy». A Antonio Calo, titular de la CGT, le debe haber quedado claro: por ahora, el pedido de subir el mínimo no imponible fue a parar al freezer. ¿Cómo los entretendrá? ¿Mostrando la suba de las asignaciones familiares que van del 20% al 40% para los trabajadores formales? ¿o la poca solidaridad frente a la pobreza? Difícil. Hace un mes atrás, el titular del Sindicato de Empleados de Comercio, Armando Cavalieri, aseguraba, horas después de firmar un aumento salarial de 27% para su gremio, que Cristina le prometió cambios en Ganancias: «La Presidenta me dijo ‘Armando, estamos en plena tarea de derogar esto, de reformar la 4ta categoría y tratar de que la gente que trabaja no cobrarle un impuesto al trabajo’. Esperamos que lo hagan pronto porque si no a la gente no le va a alcanzar la plata que sacamos por paritarias para pagar las tarifas (después de la quita de subsidios)», manifestaba entonces, con mucha certeza, el sindicalista.
CIUDAD DE BUENOS AIRES (Urgente24) A la movilización sindical de ayer, la presidente Cristina Fernández respondió con un aumento del 40% en la Asignación Universal por Hijo, y prometió un plan de viviendas para gente humilde.
Esto es, año después de la última suba, el Gobierno aumentó 40% la Asignación Universal por Hijo (AUH), al llevarla de 460 a 644 pesos por cada hijo de una familia humilde. Sin reconocer la inflación, claro.
Apenas la presidente hizo el anuncio por cadena nacional, la plana mayor del sindicalismo oficialista se puso de pie para aplaudir desde la primera fila, invitada especialmente para contrarrestar el peso de la movilización que había hecho unas horas antes en la Plaza de Mayo la CGT opositora. Estaban el secretario general de la CGT oficialista, Antonio Caló, junto a Andrés Rodríguez (UPCN), Gerardo Martínez (Uocra), Víctor Santa María (Suterh) y Hugo Yasky, de la CTA oficialista.
La medida beneficiará, además, a todos los trabajadores registrados que cobran asignaciones familiares, que recibirán en su escala más baja de salarios también un aumento de 40%. Para los sueldos más altos de la escala la suba será de 20%.
Las subas buscan contrarrestar la pérdida de poder adquisitivo por la devaluación de enero y la inflación. Sin embargo, quedaron fuera de la recomposición los jubilados, que por la ley de movilidad tienen dos actualizaciones anuales. El aumento que ya recibieron para los primeros seis meses del año apenas equiparó el costo de vida del primer cuatrimestre.
Y aunque está en carpeta un aumento del mínimo no imponible del impuesto a las ganancias, la Presidente lo congeló, al menos en lo inmediato, al advertir que sin lo que recauda el Estado por ese tributo y por el impuesto al valor agregado (IVA) no podría hacer frente al pago de las jubilaciones. Tocar los impuestos que conforman el grueso de la recaudación de la Anses impacta negativamente en los jubilados», consideró.
¿El anuncio puede calificarse, para la CGT cercana a la Casa Rosada, como un respiro ante los reiterados pedidos de actualizaciones que hasta ahora la Presidenta esquivaba? ¿No fue poco?
El Gobierno repuso el valor de las AUH de un año atrás y en menor medida el de las Asignaciones Familiares, pero sin compensar lo perdido durante los últimos 12 meses y con el riesgo de que una nueva pérdida del poder adquisitivo de estos beneficios se produzca en los próximos meses por la propia inflación. Es un incremento nominal acorde a la inflación, pero no representa una suba real, que de todas maneras se financia con los mayores ingresos que recibe la ANSeS por la suba de los salarios y de los impuestos.
Ayer, en Diputados, la mayoría oficialista frustró por segunda vez consecutiva la convocatoria opositora para debatir, en esa Cámara, una suba del piso del mínimo no imponible de Ganancias. Un tributo que carcome cada vez más los sueldos de los asalariados, jubilados y autónomos, pero que el Gobierno, evidentemente, se resiste, por ahora, a retocar.
El debate se hizo igual, aunque en minoría, luego de que el oficialismo se levantara de sus bancas. Permanecieron sentados sólo 77 diputados opositores, 20 menos que en la primera sesión especial convocada la semana pasada. No fue buena la performance opositora, pero tampoco fue buena la actitud del kirchnerismo, que se retiró del recinto a las carcajadas ante la impotencia opositora para reunir el quórum.
«Invitamos a los diputados del Frente para la Victoria y a sus aliados a retirarse, porque ya empieza la sesión opositora», exclamó, con tono burlón, el presidente de la Cámara de Diputados, Julián Domínguez, quien previamente, en la sesión anterior, había acusado a la oposición de pretender «desfinanciar el Estado» con su insistencia de modificar el impuesto.
La oposición le devolvió las gentilezas. Al arrancar el debate, el presidente del bloque de diputados radicales, Mario Negri, fustigó a Domínguez por haberle pedido «a su tropa que se vaya» del recinto. «Nosotros sabíamos en qué circunstancias íbamos a llegar al recinto, pero esta actitud del oficialismo denota mucha debilidad», enfatizó el legislador radical, quien ratificó que insistirán en sus sesiones especiales por Ganancias «todos los miércoles, hasta que el Gobierno escuche lo que está pasando».
El debate de ayer, aunque en minoría, tuvo algunas curiosidades. Por ejemplo, fue el debut de Sergio Massa, líder y candidato presidencial del Frente Renovador, como orador en la Cámara de Diputados.
«Siento tristeza y decepción por la imposibilidad de discutir junto a la bancada oficialista un planteo que no es de un sector político, sino de muchos sectores políticos, que tienen un sinnúmero de proyectos que apuntan a mejorar la distribución del ingreso en la Argentina», arrancó Massa.
El líder del FR desafió al oficialismo a admitir «con absoluta nobleza su imposibilidad o negativa a mejorar la situación de los trabajadores». Asimismo, propuso gravar la renta financiera y permitir a los trabajadores «descontar el alquiler del impuesto a las ganancias».
“Es imprescindible bajar la presión tributaria que genera el impuesto a las ganancias”, afirmó el diputado nacional.
“Bajar la presión de los impuestos va a mejorar el poder adquisitivo de la gente, así como también lo haría discutir que los trabajadores puedan descontar alquileres del impuesto a las ganancias. El cambio en ganancias beneficia a trabajadores, jubilados y a la clase media argentina”, añadió Sergio Massa.
Asimismo, el diputado declaró: “Vemos inequidades y contradicciones, por eso creemos que es imprescindible bajar la presión tributaria que genera el impuesto a las ganancias. Es absurdo que un trabajador no pueda descontar el alquiler del mismo. Tampoco entendemos cómo se niega la posibilidad de discutir que la PyMEs pueda desgravar, y sin embargo aquel que timbea sí puede hacerlo. Esa desazón nos obliga a semana a semana volver a insistir con esta problemática central para los argentinos, porque es un planteo de sectores de la sociedad, de la empresa y de la política”.
“Espero que no condenen a los trabajadores o PyMEs a esperar a una nueva elección para modificar el impuesto a las ganancias”, concluyó el diputado Massa.
También el diputado nacional José Ignacio de Mendiguren se expresó sobre el tema urgente de ganancias: «Es una pena que el oficialismo se niegue a discutir el impuesto a las ganancias en Diputados, un tema preponderante en la agenda de la sociedad. El Frente Renovador se viene planteando desde 2013 que ganancias debe estipularse por ley y dejar la discrecionalidad del Ejecutivo”.
Además, agregó: “Si la economía flaquea y hay inflación, se torna importante y urgente defender el poder adquisitivo del salario y sostener el consumo. Si no se sube el mínimo en muchos sectores, lo logrado en las paritarias, el 30% del aumento, se lo lleva Ganancias”.
Asimismo, afirmó: «El proyecto que presentamos les permite a los trabajadores deducir el alquiler como un gasto, esta es una forma aumentar el poder adquisitivo de los salarios. Todo lo que no se pague de ganancias en alquileres se transforma en poder adquisitivo y consumo: el círculo virtuoso de la economía».
En este sentido, el diputado explicó que desde la constitución del Frente Renovador se planteó hacer coincidir las agendas de la política y las del ciudadano, y que se seguirá trabajando para que el oficialismo escuche las demandas del pueblo.
Por último, agregó: “El financiamiento de las PyMEs es clave, por eso presentamos un proyecto para que exista una real ayuda al sector, descontando de Ganancias las inversiones en bienes de capital como por ejemplo las inversiones en maquinarias «.
«Queremos que los trabajadores y jubilados mejoren su calidad de vida», afirmó por su parte el diputado por el Frente Renovador, Héctor Daer, quien añadió: «Venimos nuevamente al parlamento para tratar el impuesto a las ganancias, para modificar el valor desde donde los trabajadores hoy tributan. También queremos reparar la injusticia de quienes hoy no pueden desgravar el valor que pagan por vivienda única hasta un valor de $600.000»
Daer sostuvo: «Con nuestro proyecto buscamos que los trabajadores y los jubilados tengan mejoras en las condiciones de vida, ya que con la inflación aumentando mes a mes no pueden quitarse la preocupación de si llegan o no a fin de mes”.
Por último, afirmó: «Si al Estado no le interesa subir el mínimo no imponible, está demostrando que su único interés es seguir recaudando en base al esfuerzo del trabajador, quedándose con gran parte de los aumentos del salario”.
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