A dos meses del arranque del verano.Es una norma bonaerense que aún Scioli no promulgó. Impone un mínimo de dos bañeros cada 100 personas. El impacto económico afecta más a los clubes chicos, que advierten que no podrán habilitar la temporada.
A dos meses del inicio de la temporada de verano, los guardavidas ya tienen su ley en el ámbito de la provincia de Buenos Aires. La misma, a la que le falta que sea promulgada por el gobernador Daniel Scioli, regulará su formación y el ejercicio de su trabajo profesional. Sin embargo antes de ver la luz ya genera polémica: varios clubes bonaerenses la sufrirán económicamente ya que estarán obligados a contratar más personal y a pagarle durante más tiempo. Muchas entidades pequeñas, entonces, dejarían de brindar el servicio de pileta.
El profesor Hugo Puchuri es el titular de la Cámara de Natatorios de La Plata y comentó las dificultades que tendrán cuando se ponga en marcha la ley que exige, como mínimo, tener dos guardavidas “cada cien personas o fracción en caso de natatorios o ámbitos acuáticos de hasta 300 metros cuadrados o más”. “Estamos complicados en lo comercial y en lo social. Estamos a favor de la seguridad acuática, eso sin dudas, pero esto se hizo en forma inconsulta, entre gallos y medianoche. A los clubes chicos se les hará imposible habilitarlas porque tendrán que pagar dos guardavidas por turno con un turno horario de 6 horas, sin parcializar. Además hay que agregarle un 50% de trabajo de riesgo”, dijo Puchuri, cuya entidad ya presentó en la gobernación un pedido para que Scioli vete la ley. En caso de que el gobernador la promulgue, la entidad que preside Puchuri se presentará en la Justicia para que la declare inconstitucional.
“Pensamos que es inaplicable, por ejemplo, en piletas chicas de rehabilitación, donde ya hay un kinesiólogo y un fisioterapeuta. En una pileta de 6 por 4 metros con profundidad de 1,60 metros ¿para que quieren dos guardavidas?”, comentó Puchuri. Jaquie Esquitino, por otro lado, dirige la pileta del club 25 de Mayo de Olivos y deja en claro que: “No estamos en contra del guardavida en la pileta. Es más, dirijo una campaña nacional de seguridad acuática y uno de los puntos importantes que les decimos a los chicos es que ‘nunca deben nadar donde no hay un guardavidas’. Pero con esta ley es probable que los clubes de barrio no abran las piletas. Aumentaría tanto el costo que no sería viable”. ¿Cuál sería una de las soluciones posibles? se le consultó y ella sugiere “categorizar la ley. Una cosa es un balneario y otra un natatorio-escuela o un natatorio de barrio”.
Para una colonia también habrá obstáculos. Matías Galella, a cargo de la que se realiza en el Club Buenavista de San Fernando, los explica. “El crecimiento de los costos se dará por la cantidad de meses que hay que contratar a los guardavidas. Hay que contratarlos por cinco meses, pero la temporada real dura dos”, dijo. A su vez contó que “nosotros tenemos dos piletas y debemos duplicar los costos. Nos resulta antieconómico”. El organizador está “de acuerdo con la seguridad en el agua, pero queremos intervenir en la discusión. No es lo mismo el mar que una pileta”.
Otra voz en contra de la ley que escuchó Clarín fue la de Luis González, presidente de Entidades Culturales, Deportivas y Sociales de Zona Norte. “Fue una ley inconsulta”, comenzó diciendo. “Las piletas de verano funcionan con colonia porque la gente ya no va más al club. Ante semejante gravedad, unas 350 instituciones nos pusimos al tanto y luego de las elecciones nos vamos a movilizar. Además Raverta, quien promovió la ley, tendría aparentemente un familiar relacionado con una escuela de guardavidas”, concluyó. Fernanda Raverta es diputada del Frente para la Victoria y principal impulsora de la ley.
De todas maneras no será inmediata la puesta en marcha de la ley. Primero necesita que sea promulgada y más tarde se debe crear la Comisión Provincial de Guardavidas que dictará su reglamento de funcionamiento interno dentro de los 90 días de promulgada. Esa comisión tendrá a su cargo, entre otras obligaciones, la habilitación y control del funcionamiento de las Escuelas de Guardavidas.
La escala salarial actual de los guardavidas que entró en vigencia a partir del 1° de setiembre les otorga a los bañeros un sueldo de 15.700 de básico, sobre un total de 26 días trabajados al mes. Pese a los avances que lograrán los guardavidas en su profesión, Puchuri sostiene que con esta ley, otra gente “se quedará sin trabajo si se cierran los natatorios. Médicos, gente de limpieza, promotores de seguros, el buffet, entre otros. Si los que escribieron la ley la hicieron para lograr fuentes de trabajo, tendrá un efecto boomerang”.
Fuente: Clarin
