El desempeño de los Fondos Comunes de Inversión (FCIs) resalta su versatilidad y capacidad para optimizar carteras y combinan instrumentos de corto y mediano plazo con estrategias diversificadas que se ajustan a las condiciones del mercado.
La industria de Fondos Comunes de Inversión (FCIs) desempeñó un rol fundamental en los últimos meses y se consolida, no solo como un vehículo clave para la regularización de activos, sino también como uno de los principales destinos del capital exteriorizado a través del blanqueo. En este escenario, las casas de bolsa facilitaron la incorporación de nuevos fondos al mercado, como un modo de canalizar el flujo hacia estos instrumentos, entre los que destacan los «money markets» en dólares.
Además, los expertos coinciden en que los inversores buscaron, en ese momento, opciones que garantizaran una renta fija segura, adaptada al perfil de cada cliente y a sus objetivos. En este escenario, los FCIs se consolidaron como vehículos versátiles para optimizar la gestión patrimonial, que combinan flexibilidad, seguridad y eficiencia en un entorno económico complejo.