Es un asentamiento de cartoneros ubicado en Riestra y Lafuente. Gendarmería y la Federal llegaron esta mañana al lugar, aunque sólo se limitarán a hacer un cordón. Garré aclaró que si “las familias no quieren irse, la Policía no va a actuar». Mientras tanto, desde el Gobierno porteño ofrecen 700 pesos para que los “okupas” se retiren pacíficamente.
La Cámara Penal Contravencional confirmó la orden dada por la jueza porteña Claudia Alvaro para desalojar varias veredas ocupadas por casillas en el barrio porteño del Bajo Flores.
El asentamiento se encuentra en la intersección de las avenidas Riestra y Lafuente, donde la vereda fue ocupada mayoritariamente por cartoneros.
Tras la orden de la Justicia, cerca de 160 efectivos de Gendarmería Nacional y la Policía Federal llegaron al lugar, aunque sólo se limitarán a formar un cordón alrededor de la zona y estar atentas al desarrollo de los hechos.
La ministra de Desarrollo Social de la Ciudad, María Eugenia Vidal, recalcó que la ministra de Seguridad, Nilda Garré, «aclaró que si las familias no quieren irse, la Policía no va a actuar». Al ser consultada sobre esta posición, Vidal respondió: «Es evidente que hay un incumplimiento nuevamente de la orden judicial».
Por su parte, la funcionaria porteña indicó que personal de su área se encontraba en el lugar y adelantó que aquellas familias que «no tengan donde ir o reubicarse, la Ciudad le ofrecerá la red de refugios y hogares».
«En aquellos casos que cumplan los requisitos necesarios, les daremos lo que llamamos la cuota de emergencia de 700 pesos para que puedan alquilar la habitación de un hotel o una pensión durante un primer mes, mientras vemos de insertarlos en otros programas», explicó la funcionaria en diálogo con las radios 10 y La Red.
Vidal remarcó que «bajo ningún punto de vista, ni en este caso ni en ningún otro, la oferta va a ser una vivienda definitiva».
«Todavía se está en el proceso de negociación y de acuerdo con las familias para que se vayan pacíficamente», relató sobre las acciones que se realizaban esta mañana en el lugar.
En tanto, una mujer que ocupaba la vereda relató a la prensa que ayer «un comisario vino a decirnos que nos iban a sacar, pero nosotros nos vamos a quedar».
Fuente: La Razón
