Vélez presentó una medida cautelar para jugar en Liniers pero no hubo respuesta. Y allanaron el estadio. Aunque los dirigentes de Vélez intentaron durante todo el día de ayer que se levantara la clausura de la cancha, ordenada por el Ministerio de Seguridad por la pirotecnia utilizada el lunes en la tribuna local (está prohibido su uso), no obtuvieron ninguna respuesta y, por lo tanto, hoy recibirá a Libertad, por la Copa, en la Bombonera.
A primera hora de ayer, a través de uno de los vicepresidente, Julio Baldomar, Vélez presentó una medida cautelar autónoma en el Fuero Contencioso Administrativo Federal solicitando para que se deje sin efecto el acto administrativo que ordenó la clausura del estadio hasta que sea escuchada la posición del club. Pero al no haber ninguna notificación sobre la solicitud del club, los directivos comenzaron a organizar todo para mudar el encuentro por cuartos de la Libertadores a La Boca.
Mientras tanto, encabezado por Martín López Zavaleta, fiscal penal, contravencional y de faltas de la Ciudad de Buenos Aires, por la tarde se realizaba un allanamiento en el Amalfitani. “Sabía que iba a ser difícil encontrar restos de la pirotecnia porque hubo tiempo para limpiar todo. Pero aprovechamos para pedir el padrón de socios, para poder cotejar a los hinchas que aparecen en las imágenes con los que figuran como socios. Además, hicimos una inspección ocular y hay situaciones que se pueden cambiar para mejorar la seguridad. Las medidas de clausura son a fines de que se mejoren diferentes situaciones”, le dijo López Zavaleta a Olé luego de finalizado el operativo en el estadio.
“Lo que a nosotros nos molesta es que no nos den derecho a una defensa antes de sancionarnos”, reclamó Baldomar, quien aún tiene la esperanza de que hoy a primera hora haya una contestación favorable al pedido presentado ayer para poder hacer de local en el Amalfitani. Aunque los tiempos no le juegan a favor, y el camino los lleva a la Bombonera…
Fuente: ole.com
