La coalición de centro derecha del primer ministro italiano Silvio Berlusconi sufrió el día 30 una fuerte derrota en las elecciones locales en dos ciudades importantes, Milán y Nápoles, lo cual es visto como una prueba clave para la popularidad del primer ministro.
En Milán, el hogar de Berlusconi que había estado en poder de un alcalde de centro derecha por los últimos 20 años, el candidato del principal grupo opositor, el Partido Democrático (PD), Giuliano Pisapia, fue elegido alcalde.
Pisapia, un abogado, obtuvo el 55,10 por ciento de los votos y venció a la actual alcaldesa conservadora Letizia Moratti, quien obtuvo el 44,89 por ciento de los votos.
Los italianos votaron el domingo y el lunes en varias ciudades y provincias importantes donde los candidatos no obtuvieron más del 50 por ciento de los votos en la primera ronda de votaciones celebrada hace dos semanas.
En Arcore, a las afueras de Milán, donde Berlusconi tiene su residencia principal, la candidata de centro izquierda, Rosalba Colombo, fue elegida alcaldesa con un margen de más del 13 por ciento.
Luigi De Magistris, candidato de centro izquierda, también ganó la elección en Nápoles. Uno de sus primeros retos, dijo, será terminar con la crisis crónica de la basura en esa ciudad, un problema agravado por el control de la mafia de Nápoles de la eliminación de basura en el área.
«Perdimos, eso es evidente», dijo Berlusconi después de los resultados de la elección, pero insistió en que la derrota no llevará a su renuncia o al colapso del gobierno. «Soy un combatiente, cada vez que pierdo triplico mi fuerza», agregó.
Berlusconi de 74 años, está siendo juzgado por cuatro casos relacionados con acusaciones de soborno, fraude fiscal y pagar por sostener relaciones sexuales con una prostituta menor de edad. Berlusconi niega haber hecho algo malo y acusa a magistrados de emprender una guerra política en su contra.(Xinhua)
