La polémica calificadora Standard & Poor s también lo hizo con la de Francia, Italia y Portugal
«Las acciones de hoy son fruto de nuestra creencia de que las iniciativas políticas tomadas por los líderes europeos en las últimas semanas pueden ser insuficientes para atajar totalmente el estrés sistemático en la zona euro», esas fueron las palabras de los voceros de la polémica calificadora Standard & Poors, la cual comunicó que le bajó el nivel de la deuda a Francia, España, Italia, Portugal y Chipre.
Una de las consecuencias inmediatas es que deberán pagar tasas de interés más altas a los inversores a cambio de sus emisiones de deuda soberana. A lo que se suma la influencia sobre los tipos de interés que pagan bancos, aseguradoras, empresas e inmobiliarias y, a la vez, empeora las condiciones del acceso al crédito de los organismos oficiales.
En el caso de Francia, Nicolás Sarkozy manifestó su disconformidad con lo resuelto con la calificadora norteamericana. Desde las filas gubernamentales, declararon que «Francia es un valor seguro y reembolsará todas sus deudas».
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