El Gobierno dejó trascender un adelanto del Presupuesto Nacional 2025 y algunos de los anuncios y previsiones que se hacen en el documento ayudaron a arrojar algo de calma a los mercados en la jornada de hoy, tras dos días de agitación y datos negativos para el Gobierno en materia financiera. Son señales que el ministro de Economía, Luis Caputo, busca dar a los inversores.
El Gobierno destaca que apuntan a la estabilización macroeconómica y que su plan «se sustenta en el ancla fiscal, que consiste en garantizar el equilibrio financiero del Sector Público No Financiero, eliminando la necesidad del financiamiento del déficit vía endeudamiento neto o emisión monetaria».Informate más

Dólar y el plan secreto de Luis Caputo: aguantar la devaluación, inducir la depresión económica, y después…

Adelanto del Presupuesto 2025: Gobierno prevé cerrar el año con el dólar a $1.016 y la inflación en 139,7%
Señala que «asegurar el equilibrio fiscal es condición necesaria para una macroeconomía robusta que deje de ser una traba para la inversión, las exportaciones y la generación de empleo de calidad».
En ese sentido, uno de los mensajes que el Gobierno da al mercado es «la promesa de avanzar con la transferencia de los pasivos del Banco Central (BCRA) al Tesoro con el compromiso de emisión cero», tal como señala a Ámbito Florencia Fiorentin, economista de Epyca Consultores.
Por otro lado, una señal clave que Economía desliza en el Presupuesto 2025 es que no planean renovar la vigencia del Impuesto PAIS una vez que venza su vigencia, a fin de este año. «Se sostendría hasta diciembre así como el crawling peg al 2%», destaca a este medio Hernán Letcher, director del CEPA.
«Se estima que la recaudación correspondiente a la Administración Nacional resultará alrededor del 49,7% superior a 2024 y mostrará una caída del 0,67 p.p. en términos del PIB. La recaudación se ve afectada por el impacto de la finalización del impuesto PAIS en el año 2024», sostiene el documento del Ejecutivo.
Si bien la presión de los analistas iba por el lado de una reducción de la alícuota a los exportadores para que mejoraran la liquidación de dólares, lo que se anticipó en el mensaje del Ejecutivo Nacional al Congreso sobre cómo viene armando el Presupuesto 2025 es que no van a renovar la vigencia de ese tributo una vez que pierda vigencia.
Tal como se dijo, por otro lado, el Gobierno ratificó el «crawling peg» del 2% en el Presupuesto y anticipa que el dólar oficial cotizará $1.016 en diciembre de 2024, lo que hace suponer que no habrá una devaluación fuerte ni una aceleración del ritmo de devaluación mensual del dólar de una sola vez, tal como se especulaba en el mercado.
«El tipo de cambio nominal (TCN) con el dólar se eleva a $ 1016,1 (+58,3% interanual) y la inflación proyectada al inicio del proceso de elaboración del presupuesto se ubicaba en un 139,7% interanual para diciembre de 2024, resultando en una baja promedio del tipo de cambio real (TCR) bilateral de -2,3% en el año. Sin embargo, los datos oficiales sobre inflación publicados con posterioridad al cierre de esta etapa de elaboración del presupuesto sugieren que la inflación estará situada por debajo del 130% interanual a diciembre 2024», afirma el Gobierno.
En lo que respecta a la recesión que atraviesa la economía, el Presupuesto anticipa que esperan una recuperación del consumo. «Desde el lado de la demanda, las expectativas para los próximos meses también son positivas. Por un lado, por la mejora en el poder adquisitivo de los salarios frente a la desaceleración de la inflación, el aumento real en los programas sociales sin intermediarios orientados a la población más vulnerable, y la suba en las jubilaciones y pensiones tras el cambio en la fórmula de movilidad previsional realizado en abril», promete el documento.
Señala, por otro lado, que, a partir de abril, varios sindicatos importantes cerraron acuerdos por encima de la inflación del mes y que la trayectoria de aumentos salariales para los próximos meses también es superior a las expectativas de inflación del mercado. «Es esperable que las remuneraciones en términos reales continúen mejorando a lo largo del año y favorezcan la recuperación de la actividad económica», anticipan.
Este es un tema clave porque una de las variables que mira el mercado es la recesión que generó el programa del Gobierno como consecuencia de la licuación del poder adquisitivo del peso y el enfriamiento de la economía que se implementó con el fin de controlar la inflación, vía recortes, congelamiento de salarios en algunos casos y reducción de la emisión, lo que repercutió fuerte en bolsillos y en la actividad económica.