La tercera parte de la saga de “Las crónicas de Narnia”, filmada completamente en 3D, llega hoy al cine. En esta flamante aventura, los niños, ya crecidos, emprenden su último viaje al mundo fantástico.
Mundo mágico. Un paraíso en donde abundan dragones, duendes, animales parlantes, guerreros perdidos y peligros por doquier. Un escenario fantástico, con paisajes increíbles que siguen sorprendiendo y maravillando en esta nueva entrega de “Las crónicas de Narnia”, la tercera parte de la saga que esta vez lleva el nombre de “La travesía del Viajero del Alba”, basado en el libro escrito por C.S. Lewis, y que hoy -sí, leyó bien- llega a todas las salas.
Dirigida por Michael Apted, esta nueva crónica trae a los hermanos Edmund y Lucy a la última aventura del mundo de Narnia. Lejos están ya de ser los niños que por primera vez conocían el país del sabio león Aslan, gracias a un armario que encontrara Lucy. Los dos hermanos más pequeños (los más grandes, Susan y Peter, ya no son de la partida, sólo aparecen en recuerdos) despedirán la niñez en un viaje que los enfrentará a sus miedos y, sobre todo, a su propia identidad.
Narnia puede abrirse en el momento más inesperado y de la manera más sorprendente: las puertas de un armario o una pintura donde un barco está navegando, como en esta oportunidad. Aslan, el león protector de este mundo, llama a quienes él considera que tienen que atravesar por una experiencia necesaria para crecer.
Esta es la tercera parte de una saga que en la pantalla grande arrancó en 2005 con “Las crónicas de Narnia: el león, la bruja y el ropero”, que en 2008 volvió con “Las crónicas de Narnia: el príncipe Caspian”, y que para esta nueva versión denominada “El Viajero del Alba”, cambió director y compañía productora: las dos primeras fueron hechas por Disney quien decidió correrse de escena. Fox ocupó el lugar vacante y apostó al 3D.
Donde no hubo cambios es en el elenco de actores: siguen en sus roles los cuatro chicos que encarnan a los hermanos Pevensie. Esta vez, los menores vuelven a las tierras de Narnia acompañados por el primo Eustace, para reunirse con el príncipe Caspian y un ratón guerrero llamado Reepicheep, junto a ellos se subirán a un barco llamado el Viajero del Alba, para recorrer un largo camino y cumplir una nueva misión. Juntos embarcarán en la búsqueda de los siete desaparecidos señores de Narnia tal y como le prometieron a Aslan. Este será un peligroso, emocionante y arriesgado viaje que los llevará a cruzar los mares a bordo de la embarcación. “Es una historia más brillante y luminosa que las anteriores, que transcurre prácticamente a bordo de un barco. Eso nos ha permitido darle un toque épico y aventurero”, cuenta el director. “El autor nos propone dos viajes simultáneos. Uno, a través de los mares desconocidos. Y, el otro, sobre la transición de la infancia a la adultez. Las fuerzas del mal a las que se tienen que medir durante este viaje, enseña a los personajes a tomar decisiones y a enfrentarse con sus destinos. En definitiva, a forjar su carácter”, concluyó.
Fuente: La Razón