El endeudamiento público neto en Gran Bretaña registrado en agosto pasado alcanzó niveles récord para ese mes, y el gobierno advirtió que mantendrá el rumbo económico de ajustes más allá de la advertencia del Fondo Monetario Internacional (FMI) que pidió revertir esas políticas.
La Oficina Nacional de Estadísticas detalló que el endeudamiento público excluyendo intervenciones financieras trepó a 15.934 millones de libras esterlinas (25.054 millones de dólares) en agosto, de 14.003 millones de libras un año atrás.
El endeudamiento público para el año fiscal 2010-2011 fue revisado a la baja, en 136.000 millones de libras (213.846 millones de dólares), detalló la agencia de noticias ANSA.
Por otra parte, la confianza del consumidor en Gran Bretaña cayó en agosto pasado a su nivel más bajo en cuatro meses, como consecuencia de los problemas económicos en el país.
De acuerdo con un informe del banco Lloyds, los disturbios y saqueos en Londres y otras ciudades inglesas, la incertidumbre económica global y un aumento de la inflación hicieron caer la confianza.
No obstante, el viceprimer ministro, el liberal democrático Nick Clegg, afirmó hoy en el congreso anual de su partido, en Birmingham (centro de Inglaterra), que no se modificarán los programas de recortes.
En tanto, el Tesoro negó un reporte de la BBC acerca de que ministros del gobierno están considerando un aumento de 5.000 millones de libras esterlinas (7.860 millones de dólares) para el gasto en infraestructura.
«El gobierno ha establecido los planes de ajuste y los mantendrá», declaró una fuente del Ministerio de Finanzas.
Este martes, el FMI rebajó sus pronósticos de crecimiento para Gran Bretaña, y advirtió al gobierno que demore su plan de reducción del déficit fiscal si la economía no logra repuntar.
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