Habló de una «inflación de normas penales» y sostuvo que los resultados de leyes de seguridad «no necesariamente son positivos». Cuestionó a un artículo de La Nación que acusa al oficialismo de haber “congelado” 130 proyectos en esta materia.
El jefe de Gabinete, Jorge Capitanich, llamó a «no asociar el número de iniciativas (legislativas) con la calidad de diseño de las mismas» y sostuvo que la sanción de normas en materia de seguridad no debe estar atada a «una estrategia demogógica» para favorecer a un «candidato presidencial».
En este sentido, Capitanich habló de una «inflación de normas penales» durante la última década, destacó la sanción en en este período de ocho leyes vinculadas con la seguridad, aunque sostuvo que sus resultados «no necesariamente son positivos».
Además, remarcó que muchas veces legisladores «promueven iniciativas que no tienen la consistencia mínima para convertirse en una norma legal que tenga buenos resultados».
De esta forma, en su habitual conferencia de prensa en la Casa de Gobierno, el jefe de Gabinete salió al cruce de una información publicada por el diario La Nación, según la cual «el oficialismo congeló más de 130 proyectos de ley sobre seguridad».
El funcionario enumeró que durante la década se sancionaron las siguientes leyes: 25.822 (penas para delitos con armas de juguetes); 25.886 (portación de armas); 25.890 (aumento de penas para el robo de ganado); 25.891 (registro especial de teléfonos celulares); 25.892 (cambios en el plazo de otorgamiento de libertad condicional); 25.893 (prisión perpetua para delitos sexuales seguidos de muerte); 25.928 (nuevas reglas para el concurso de delitos). Capitanich aseguró que todos los días ocurren hechos negativos y positivos en la Argentina y que los medios realizaron «un cambio en la agenda» luego de que se normalizaran las variables económicas que generaron tensión en los primeros dos meses del año.
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