La Bolsa porteña revertía la leve tendencia alcista con la cual comenzó la jornada y arrastrada por el débil desempeño de los mercados extranjeros el índice Merval retrocede 1,21 por ciento; mientras que los cupones atados al PBI suben 0,22 por ciento cuando restan dos horas para el cierre.
En otra jornada sin aspectos de relieve en materia cambiaria y con un trámite monótomo de negocios, el dólar repitió los precios que viene exhibiendo en las últimas ruedas.
El dólar minorista o al público permaneció inmovilizado en 3,96 pesos para la compra y 4,00 para la venta, con un máximo de hasta 4,01 en algunas agencias de cambio del microcentro porteño.
Los precios de la divisa en el mercado mayorista mostraron un estrecho rango de fluctuación o diferencias de apenas unas milésimas entre los mínimos y máximos del día.
En el mercado mayorista el billete estadounidense terminó a 3,975 pesos o una milésima debajo del precio de ayer.
Por el lado de los negocios a futuro, en el Rofex de Rosario los contratos que vencen a fin de mes cerraron nuevamente a 3,977 pesos, mientras que los compromisos de febrero se resolvieron a 4,030 pesos (anterior 4,032).
Según los operadores consultados, la oferta de dólares sigue siendo importante a pesar de que los negocios en general han mermado bastante y la demanda, por el contrario, no muestra signos de recuperación.
En ese contexto se genera un clima en donde «la caída de la divisa es casi una constante y si la misma no se concreta de una manera abrupta y decidida es sismplemente por la presencia en general activa del Banco Central tanto al contado como a futuro», sostiene Carlos Risso, de Zonabancos.
Los expertos explican que los mecanismos utilizados por la autoridad monetaria apuntan a intentar mejorar la curva de rendimiento de las operaciones con divisas a término para estimular la aparición de compradores en el contado «que revelaran al Banco Central del papel de sostén del tipo de cambio».
El euro en la «city» porteña cerró a un promedio de 5,180 y 5,29 pesos para la compra y venta, respectivamente, mientras que en el exterior extendió su mejora y recuperó el nivel de 1,336 dólar que había perdido a principios de año.
La reacción de la moneda única europea está directamente emparentada con las dudas que resurgieron entre los inversores sobre el ritmo de recuperación de Estados Unidos luego de las subas que mostraron los pedidos de seguros por desempleo la semana pasada.
Fuente: telam
